'Era Pacifista, amaba a Ghandi, era vegetariano, pero le ganó el amor por la Patria. El no combatió, no tiró un tiro siquiera. Sólo fue a Monte London porque los mandaron, pero no entraron en combate porque los ingleses tenían todo tomado', resume Delmira, madre de Julio y de Graciela, Roberto (también fallecido) y Viviana.
El recuerdo
Al momento de la guerra, Julio ya había cumplido con el servicio militar en el Regimiento III de Infantería Mecanizada General Belgrano, de La Tablada y desarrollaba tareas docentes en la Escuela N°32 del barrio Don Juan de Laferrere, que hoy lleva su nombre. 'Cuando se fue mi nuera estaba embarazada de cinco meses. Se fue con todos. A él nunca le llegó la cédula de citación, pero vio los camiones con los muchachos, entró a casa y me dijo que se iba. Yo le dije Julio no podés irte, vas a tener un hijo. Me respondió: Mamá cómo me podés decir eso. No me puedo quedar, no me podría sentar en un aula, sería un cobarde. Ante mi insistencia me dijo: ellos son mis compañeros, estuvimos juntos y ahora cómo los voy a dejar solos. Voy a ir y no pasará nada'.
Un par de cartas llegaron desde Puerto Argentino, las que Delmira guarda como su mayor tesoro y que comparte con su nieta, Julia (34 años). 'Estuvo en Puerto Argentino, luego lo mandan en grupo de apoyo a Monte London y él muere bajando de ese monte, sin combatir, producto de un proyectil que le pegó al igual que a otro soldado. Los dos murieron allí', subraya.
La historia se la cuentan quienes estuvieron con él, es decir los propios protagonistas. 'Walter Neira era su compañero de trinchera y hace 33 años que todos los 14 de junio, él viene a tomar mate conmigo. Yo tenía una versión de cómo había muerto mi hijo y Walter sólo escuchaba. Pero un día, a través de un programa de TV me di cuenta que no era como yo creía. Veo un misil que explota y forma un cráter enorme. Yo fui a Monte London y vi esos cráteres. De él no quedó nada de Julio. Y Neira me dijo: se dio cuenta. Fue así. Yo no se lo quería decir. En ese cráter quedó Julio por un misil', relata y sostiene: 'Por más que esté volatilizado, yo sé que él está ahí, porque fue a pelear por su tierra. Es que Julio era muy solidario, entregado a los demás'.
Delmira no tiene certezas del día, pero sí del lugar. 'La guerra terminó el 14 de junio y él murió el 10 dicen los documentos de defunción, pero no es seguro. Yo sé que quedó en Malvinas', dice. Es que Julio Cao se quedó de guardia en Malvinas.