El Papa Francisco condenó con firmeza la guerra y el terrorismo durante la misa que presidió en el Vaticano este Domingo de Ramos.
El sumo pontífice presidió en la plaza de San Pedro del Vaticano la celebración litúrgica del Domingo de Ramos y la Pasión del Señor, con la que dio inicio a los ritos de Semana Santa.
Ante una multitud, se refirió a los atentados en Estocolmo, Egipto y a los ataques en Siria.
Francisco envió sus condolencias a los familiares de las víctimas, a los heridos y a todo el país, y pidió que el Señor convierta “el corazón de las personas que siembran terror, violencia y muerte”, así como el de aquellos que “trafican con armas”.
No fue la única condena que realizó contra el terrorismo, Jorge Bergoglio también mencionó el atentado del pasado viernes en Estocolmo cuando un camión robado irrumpió en la principal calle peatonal de la capital sueca y causó 4 muertos.