Un hermano del ex futbolista Claudio “El Turco” García fue detenido, como acusado de haber atropellado a dos agentes de tránsito y llevado a uno de ellos 300 metros sobre el capot, cuando en septiembre de 2016 se fugó de un control de alcoholemia que le dio positivo en la localidad de Vicente López.
Se trata de Pablo Javier García (de 43 años), quien trabaja como remisero y es hermano del mencionado ex delantero de Huracán, Racing y la Selección Nacional. Su aprehensión fue concretada en un domicilio de la calle Santander al 5000 del barrio porteño de Villa Lugano, por efectivos de la Comuna 12 de la Policía de la Ciudad y de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Isidro.
El fiscal Martín Gómez, de la Unidad Funcional de Instrucción Descentralizada de Vicente López, pidió en septiembre de 2016 su detención convencido, luego de ver los videos y escuchar los testimonios, de que García actuó en forma “temeraria”. Ahora, afrontará los cargos de “homicidio agravado criminis causae (matar para ocultar otro delito y buscar la impunidad) en grado de tentativa”, además de “robo”, porque al escapar le arrebató a uno de los agentes de tránsito el talonario de boletas, el ticket del test y los documentos que tenía en la mano de otro conductor que en ese momento estaba en el mismo control.
Además, quedó imputado por “atentado y resistencia a la autoridad” debido a la fuga no sólo de los agentes de tránsito sino también de un patrullero de Prefectura Naval que lo persiguió pero no lo interceptó.
Fernando Burlando, abogado de Pablo García, había presentado en su momento un planteo de eximición de prisión, pero fue rechazado en todas las instancias.
Al pedir su detención, el fiscal Gómez valoró que al arrancar su auto para huir del control de alcoholemia, arrastrar a un agente que se colgó de la puerta y llevar 300 metros a otro sobre el capot, García seleccionó un “medio idóneo para causar la muerte” y pese a advertir que podía ocasionar ese resultado continuó con su acción.
El hecho ocurrió a las 4.30 del 9 de septiembre de 2016 en la intersección de la avenida Del Libertador e Hipólito Yrigoyen, en Vicente López, donde la Municipalidad habían montado un control de alcoholemia. Entonces, los agentes Diego Martín Acevedo y Emiliano Rubén Racedo, detuvieron la marcha del Volkswagen Bora conducido por García, le hicieron el test de la pipeta y arrojó como resultado que tenía 1,5 gramos de alcohol por litro de sangre, el triple de los 0,50 que permite la ley.
Los agentes le pidieron al conductor que descienda del auto, pero García arrancó el auto y escapó pese a que Racedo se le colgó de la puerta y Acevedo se le subió al capot, lo que quedó registrado en un video grabado por otros inspectores.
Racedo cayó a pocos metros, el Bora huyó zigzagueando por Libertador con Acevedo en el capot hasta que luego de un frenada el agente de tránsito cayó al asfalto, y el automovilista logró escapar pese a que también lo persiguió un patrullero de Prefectura.