Intentó matar a su novia, le dieron arresto domiciliario pero no lo cumple

Tras el pronunciamiento de la Sala I, con las firmas de los camaristas Daniel Carral y Ricardo Maidana, Claudia Nuñez, mamá de Erica, sostuvo que “por un lado, junto a mi abogado Luis Roberto Logran, estamos más tranquilos, ya que la condena fue confirmada en esta segunda instancia, pero por el otro, mientras este tipo siga libre, la sensación que tengo es que mi hija sigue estando en riesgo, que esta agresión puede repetirle, que la próxima vez puede costarle la vida”.

En tal sentido, la mujer señaló que “mientras ella sufre secuelas psicológicas por todo lo que padeció durante ese noviazgo violento, ha tenido intentos de suicidio y permanente manifestaciones sobre que no tiene más ganas de vivir, al condenado por haber intentado matarla le otorgan un montón de beneficios. Se lo ha visto muchas veces por las calles de Florencio Varela cuando tiene presuntamente arresto domiciliario, pero siempre hay una excusa, que sale a estudiar, que sale para ir al psicólogo, que esto, que lo otro. El anda en libertad y mi hija encerrada por el temor que le tiene”.

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Luego de hacer hincapié en la necesidad de “cambiar las leyes, ya que a cierta edad o en estos casos, no debe haber inimputabilidad que valga”, Claudia Nuñez manifestó que “el año pasado lo condenaron, pero como lo juzgaron en el Tribunal de Responsabilidad Penal Juvenil Nro. 2 de Quilmes, no le aplicaron la pena hasta que no tenga la mayoría de edad y también hasta que el fallo quede firme. Ya rechazaron en Casación, el recurso que interpuso el defensor oficial Carlos José Laogioa, pero tiene dos instancias más en la Corte de la Provincia y en la de la Nación. Entonces, parece que este calvario nunca termina, la impunidad sigue y el que quiso asesinar a Erica está libre, por más que me digan que tiene arresto domiciliario, ya que pasaron muchos meses y ni siquiera le consiguieron la tobillera para controlarlo”.

El episodio se registró a fines de mayo de 2017, en una vivienda del barrio 9 de Julio de Florencio Varela, cuando ante una situación de querer finalizar la relación de parte de la chica, fue atacada por su ex novio, quien la sorprendió mientras dormía. La golpeó a trompadas en el rostro, quiso degollarla y le provocó otros cortes con una cuchilla tipo hachita, pese a estar ensangrentada la arrastró por el piso de los pelos y le decía “si no sos mía, no sos de nadie, puta”.

Una vez consumada la agresión, el ex novio de Erica escapó corriendo, se escondió en la casa de su hermana, pero fue descubierto y detenido, al ser denunciado. En principio se lo acusó por el delito de “lesiones graves”, constatadas por los peritos médicas las heridas que padeció la joven, pero luego la causa se recaratuló como “tentativa de homicidio agravada por la relación de pareja y en contexto de violencia de género”. Entonces, se le dictó una restricción de acercamiento a la víctima, se lo procesó sin prisión preventiva y en el posterior juicio fue condenado, pero la pena no se aplicó por los 17 años que tenía al consumar el ataque y ahora la sentencia ha sido ratificada en segunda instancia.

“Mientras nosotros como familia hace casi dos años estamos viviendo una situación terrible, seguimos sin encontrar respuestas concretas de la Justicia. Desde el Estado tanto se dice que se apoya a las víctimas de violencia de género, pero después en la práctica pasan estas cosas. Mi hija tuvo que ser sometida a varias operaciones, está en tratamiento psicológico, sufre ataques de pánico y con 19 años no tiene ganas de vivir. Y al que la quiso matar le dan todos los beneficios desde que la jueza Rita Isabel Cerioni le otorgó la prisión domiciliaria, hace lo que quiere. Hemos denunciado que anda por todo Florencio Varela, pero cuando pedimos el registro de las cámaras de seguridad, justo esa parte, nunca aparece”, concluyó.