La Justicia ordenó investigar a nueve personas por el ocultamiento del cuerpo de Erica Soriano, la joven asesinada en 2010 por su pareja Daniel Lagostena, quien resultó condenado a 22 años de prisión.
Entre los imputados aparecen dos hermanas del femicida y su ex cuñado. En el fallo donde se condenó a Lagostena (58) a 22 años de prisión por “homicidio simple en concurso ideal con aborto, en contexto de violencia de género” de Soriano (30), el Tribunal Oral en lo Criminal Nº 9 de Lomas de Zamora instó a “extraer testimonio del veredicto” y remitirlos a la UFI Nº 3 lomense “a efectos de que su titular tome conocimiento de las declaraciones prestadas” por nueve allegados al femicida.
Los que están en la mira bajo la presunción de ayudar a Lagostena a desaparecer el cuerpo de Soriano, que fue vista por última vez el 20 de agosto de 2010, son Viviana y Lorena Lagostena (hermanas del condenado); su ex cuñado Gilberto Moreno Vázquez; sus sobrinos Braian Poublan y Elías Poublan; Leonardo de Simone, dueño de una casa de sepelios donde podrían haber cremado a la joven; Gabriel De Lio, quien se habría enterado del hecho por De Simone, Viviana Correa, ex pareja de este último y Joan Manuel Fontela.
En el extenso fallo de 216 hojas, publicado por Info Región, los jueces Victoria Ballve, Mario Sebastián Rigiero y Víctor Darío Bellucci solicitaron indagar “la posible comisión del delito de falso testimonio por parte de Carla Micaela Di Viesti”.
Con respecto a la condena a 22 años de prisión para Lagostena, la jueza Ballve argumentó en su voto: “Tengo por cierto y legalmente acreditado que, en fecha y hora no determinadas, pero comprendida entre las 22:30 del día 20 de agosto de 2010 y las 15 del 21, en el interior del domicilio donde residían -pasaje Coronel Santiago 1433 de la localidad y partido de Lanús-, un sujeto de sexo masculino, mayor de edad, ejerció violencia -de un modo que no se pudo establecer- contra su pareja Erica Paola Soriano, la cual se encontraba embarazada aproximadamente de ocho semanas”.
Para su decisión, la magistrada dijo tener en cuenta las declaraciones de varios testigos, entre los que se cuenta el de la madre de Soriano, María Ester Romero, quien recordó que su hija “estaba viviendo una pesadilla”. A eso sumó el informe psiquiátrico sobre Lagostena, que reveló que posee “una personalidad psicopática con marcados rasgos narcisistas”.