Una Fiscalía de Instrucción porteña investiga la denuncia de una joven, que fue encontrada deambulando en la zona de Constitución y contó al personal policial que había sido drogada, secuestrada y violada durante más de 12 horas, en momentos en que se encontraba haciendo compras en una feria de La Salada.
La víctima, madre de dos niños y que se dedica a revender prendas de vestir, señaló que todo ocurrió el sábado pasado en horas de la mañana, cuando recorría los pasillos del centro de compras Urkupiña y sufrió un episodio de violencia, del cual recuerda apenas ciertas secuencias, debido a que, asegura, le suministraron alguna sustancia que la dejó en estado de indefensión.
Según trascendió, la mujer refirió que se dirigió junto a su padre y uno de los hijos a comprar ropa a esa concurrida feria de La Salada, allí en cuando compraba y sus acompañantes quedaron afuera, fue interceptada por un sujeto que pasó a su lado, le aplicó burundanga y en pocos minutos, comenzó a sentirse mal.
"Ella normalmente entra al pasillo 4 de la feria Urkupiña, retira los pedidos que hace y sale enseguida", comentó el papá de la joven al portal InfoRegión, quien difundió el caso, en el que la joven fue violentada, violada y abandonada tras ser sometida hasta casa la noche del último sábado.
Por su parte, el abogado Diego Stratiotis, quien asumió la representación de la denunciante, sostuvo que su clienta "fue drogada y aprovecharon para llevársela secuestrada en un auto con varios hombres, quienes la manosearon y la violaron de manera grupal. Estuvieron en una zona de monoblocks, con ella arriba del vehículo, hasta que la dejaron abandonada, semidesnuda, en el barrio de Constitución, donde como pudo pidió ayuda a un policía".
A partir de allí, se radicó una causa ante la Fiscalía de Instrucción Nro. 38 y a la víctima se le aplicó el protocolo para los casos de abuso sexual, mientras ahora se intenta dar con testigos que hayan presenciado el momento del rapto o cuando se encontraba cautiva, además de visualizar imágenes de cámaras de seguridad para identificar a los ocupantes del vehículo.
En su testimonio, la joven habría asegurado que todo se inició cuando alguien pasó por su lado en uno de los pasillos de la feria que estaba atestado de gente, ese sujeto la rozó, la empujó y otros dos se colocaron por detrás. De inmediato, empezó a sentirse mareada y de la sensación de desvanecimiento, que el cuerpo "no me respondía", hasta que un desconocido la tomó de la mano y se la llevó.
Si bien tiene "imágenes borrosas" de lo acontecido, la víctima sostuvo que "ya durante el trayecto en el auto, me sacaron el pantalón y la bombacha, me manosearon toda y no me dejaban mirar para afuera, tapándome con una campera".
Según se pudo averiguar, tras ser violada en forma grupal, se detuvieron en un complejo de monoblocks, donde le dieron de tomar un "líquido amargo de color verde", hasta cuando ya era de noche, la dejaron abandonada en el barrio porteño de Constitución.,
Uno de los captores, le habría dicho: "Tenés un Dios aparte, te salvaste", para luego relatar lo sucedido a un oficial de la Policía dela Ciudad que encontró caminando. Ya en una comisaría, se labraron las actuaciones y se dio intervención a la Justicia, que dispuso que la joven sea revisada por los forenses y se obtengan muestras para ser cotejadas, a futuro, con el ADN de los autores de este ataque.