Hasta entonces, la
Cámara alta contaba con
48 miembros. La UCR impulsó la designación de un senador por la minoría -cuestión de asegurarse al menos un senador por distrito-, estirando el número de
integrantes a 72. Con el tiempo, la norma fue desvirtuándose pues en muchos casos el senador "
por la minoría" corresponde a una escisión del oficialismo, que de esa forma se queda con los tres senadores de la provincia.
Esa situación se da en la actualidad en cuatro distritos:
Santiago del Estero, Misiones, La Rioja y Tierra del Fuego. En
Corrientes, Ciudad de Buenos Aires y Santa Fe hay también senadores que entraron a través de la oposición y luego se alinearon o suelen ser funcionales -no siempre, aclaremos- al kirchnerismo.
El Senado se renueva por tercios: ocho provincias en cada elección. A partir de la asunción del nuevo Senado, en 2001, se estableció por sorteo cual sería el orden de esa renovación. Así, hubo una tanda de senadores que
sólo tuvieron dos años de mandato, otra de cuatro y la restante que completó los seis previstos por la Constitución. El 13 de diciembre de 2001 se realizó en el recinto del Senado un sorteo utilizando dos bolilleros, en uno de los cuales había bolillas con los números 2, 4 y 6, que correspondían al tiempo de mandato y en el otro 24 bolillas que representaban a las 23 provincias y a la Ciudad de Buenos Aires.
Sólo dos años les correspondió entonces a Corrientes, La Pampa, Santa Fe, Chubut, Tucumán, Mendoza, Córdoba y Catamarca. El hoy gobernador
José Alperovich y el sindicalista
Luis Barrionuevo fueron así dos de los senadores que tuvieron mandatos "cortos".
Cuatro años correspondieron a Jujuy, La Rioja, Formosa, San Juan, Misiones, San Luis, Buenos Aires y Santa Cruz. En esta tanda había senadores como
Raúl Alfonsín, Cristina Fernández de Kirchner y Eduardo Duhalde, quien pocos días después asumiría como presidente de la Nación.
La última tanda, la de los distritos cuyos miembros pudieron completar los seis años, correspondió a Ciudad de Buenos Aires, Neuquén, Salta, Tierra del Fuego, Santiago del Estero, Chaco, Entre Ríos y Río Negro. Había entonces senadores como
Rodolfo Terragno y Miguel Pichetto. El radical hoy quiere volver al Senado y se propone intentar ser candidato compitiendo en las
PASO; el presidente del bloque oficialista de la Cámara alta buscará
revalidar su mandato para volver a intentar luego dentro de dos años ser gobernador de su provincia.
El ciclo de la renovación se completará este año por segunda vez, de manera tal que estos ocho distritos son precisamente donde la ciudadanía elegirá sus representantes para el Senado.
Aquí están, éstos sonLos representantes actuales de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires son
Daniel Filmus (FpV), María Eugenia Estenssoro (CC-ARI) y Samuel Cabanchik (Probafe).
En Entre Ríos, los kirchneristas
Pedro Guastavino y Elsa Ruiz Díaz y el radical
Arturo Vera.En Salta, los peronistas disidentes
Juan Carlos Romero y Sonia Escudero, y el renovador salteño
Juan Agustín Pérez Alsina.En Neuquén, el Frente para la Victoria expone a
Marcelo Fuentes y Nanci Parrilli, en tanto que el Movimiento Popular Neuquino pone en juego a
Horacio Lores.En el Chaco están por el FpV Fabio
Biancalani y Elena Corregido, y el radical
Roy Nikisch.
En Río Negro el FpV cuenta con
Miguel Pichetto y María José Bongiorno, en tanto que la UCR tiene a
Pablo Verani.Santiago del Estero tiene a
Ana María Corradi y Ada Itúrrez de Capellini por el oficialismo, y al radical
Emilio Rached.
Por último, en Tierra del Fuego está el ex gobernador radical y actual kirchnerista
Mario Colazo y los aliados de Nuevo Encuentro
Rosa Díaz y Osvaldo López.
Veinticuatro senadores en disputa, doce de los cuales son hoy del kirchnerismo. Otros cinco suelen votar en consonancia con el oficialismo. Es el caso del porteño Samuel Cabanchik, el neuquino Horacio Lores y los fueguinos Rosa Díaz y Osvaldo López, a los que en los últimos tiempos se ha sumado en algunas votaciones -aunque no en las más comprometidas- el salteño Juan Agustín Pérez Alsina.
El panorama para el oficialismo se complica si se piensa en los dos tercios para aspirar a una eventual
reforma constitucional. Porque el bloque kirchnerista cuenta hoy con
34 miembros y 9 aliados -aunque no todos permanentes-.
Según las estimaciones, el kirchnerismo seguiría manteniendo los dos senadores por la mayoría en Entre Ríos, Chaco y Río Negro; se quedaría con los tres en disputa en Santiago del Estero, y podría recuperar los dos de la mayoría en Salta, pero perdería un aliado circunstancial, igual que en Capital Federal, mientras que en Neuquén podría perder un integrante del bloque K a manos del MPN, que igual es aliado. En Tierra del Fuego, contando a propios y aliados, la sumatoria es neutra. Sí recuperaría uno en Santiago del Estero.
En octubre, el kirchnerismo pone en juego 12 integrantes de su bancada y cinco aliados. En el cálculo más optimista podría obtener 14 senadores propios y cuatro aliados, con lo que no hay ninguna duda de que el oficialismo seguirá manejando esa cámara, pero le seguirían faltando ocho senadores para llegar a los 48 que representan los dos tercios. Demasiados.