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Por HERNAN RIZZONE
Una de las apuestas televisivas más ambiciosas e importantes llega esta noche a la pantalla chica: se trata de Caín & Abel, que debutará a las 22.30 por Telefé, con un elenco de lujo compuesto por Joaquín Furriel, Fabián Vena, Luis Brandoni, Julieta Cardinali y Vanesa González. La propuesta cuenta la historia de una batalla entre hermanos que modificará para siempre la vida de una familia entera. La antigua lucha entre el bien y el mal: los celos, la envidia, la traición, la codicia, forman parte de este relato acerca de la complejidad de las relaciones humanas, donde el amor existe a pesar de todo y lucha por prevalecer en medio de la hostilidad. Una de las cabezas visibles del staff de la tira, Joaquín Furriel, dialogó con este medio sobre varias cuestiones. A la hora de hablar de su personaje, llamado Agustín Vedia, y sobre el entorno de la historia, el intérprete aclaró: “Me parece que será una novela del estilo de Montecristo, con muchas cosas para descubrir y disfrutar, con seguridad, hay personajes bien definidos con muchos contrastes más un elenco que es un placer enorme trabajar con ellos. La trama exhibe a una familia poderosa y particular. A partir de un accidente se podrán descubrir algunos asuntos familiares. Mi personaje por un conflicto familiar se autoexilia en México y la novela comienza cuando vuelvo por un evento familiar y mediante unas cuestiones que pasan decido quedarme para entrar en zona de suspenso. Por supuesto, hay también historias de amor muy potentes con Vanesa González y Julieta Cardinali”. A las palabras de Furriel se pueden agregar otros aspectos que sucederán desde esta noche. El amor de una mujer (Vanesa González) vuelve a enfrentar a Agustín Vedia (Joaquín Furriel) con su propio hermano Simón (Fabián Vena) que, a pesar de estar recientemente casado con Pilar (Mercedes Oviedo), no la ha olvidado. El día del regreso de Furriel se producen dos acontecimientos trágicos por los cuales se empezarán a develar los turbios manejos que Eugenio Vedia, su padre (Luis Brandoni), lleva adelante en su empresa constructora, en sociedad con Gregorio (Luis Machín), su mano derecha y más fiel verdugo. Consuelo (Virginia Lago) es la discreta señora de Vedia, acostumbrada a esconder los sentimientos bajo llave. Alejado de los negocios, Santino (Juan Bautista Greppi), el menor de los hermanos, intenta diferenciarse de una familia llena de secretos pero paradójicamente irá forjando sus propias emociones clandestinas. Beatriz (Mara Bestelli), la única hija mujer de la familia Vedia, irá develando poco a poco la trama de la farsa en la que vive inmersa, donde la violencia familiar se desarrolla con absoluta sutileza. Su marido, Alfredo (Federico D’Elía) es un personaje oscuro y forma parte del costado más sangriento de la poderosa empresa familiar.
El caso Puig
En medio de la entrevista surgió la reciente renuncia de Arturo Puig a la novela Secretos de Amor, que anda en la cuerda floja en Telefé. La pregunta apareció al toque para Furriel, ¿Se te cruza por la cabeza que pueda pasarte algo similar? El artista respondió: “No sé las razones de Arturo que lo llevaron a terminar antes. Hasta ahora no me pasó algo así. Ojalá que Caín y Abel no sea la excepción. En caso que suceda, después que pase te digo. En principio, pienso mucho en el trabajo y los resultados no dependen de mí. La actividad laboral es un recorrido mucho más amplio”.
Otro tema que es un clásico de la pantalla chica se da con el rating, que pareciera pertenecerle a Tinelli, no hay ciclo que pueda contra el amo y señor de la TV. En cuanto al pensamiento de Furriel sobre cómo darle batalla a Marcelo desde la pantalla de enfrente dijo: “Yo nunca tuve un concepto de competencia, pienso en que me vaya bien a mí, soy actor, no productor. Mi única competencia es que me vaya mejor que el ciclo anterior que hice porque así voy creciendo. No es mi problema, ni estoy pendiente de lo que pasa en otro lugar. Nosotros apuntamos a un público que tenga ganas de ver una gran historia”.
Entre las tantas declaraciones que suelen realizar los actores, algunas son llamativas. Una vez Joaquín confesó: “Tengo más voluntad que talento”. Son pocos los casos de semejante sinceridad que dejan en claro la integridad de un actor cabal.
En familia
Al referirse al tema, el protagonista de Caín y Abel manifestó: “Si entendemos por talento que una persona de manera innata puede hacer algo con buena aceptación, eso es un talento. Yo siento que tengo que prepararme, estudiar y elegir contextos donde pueda crecer. En ese sentido lo mío pasa por la voluntad y el trabajo”. En el plano personal, la vida en pareja con la actriz Paola Krum es algo sumamente importante en la existencia del actor y en sus acciones laborales. Por ende, él contó detalles sobre el hecho que ambos compartan la misma actividad: “Nosotros tenemos un equilibrio donde compartimos hasta el punto que la decisión final sobre una oferta de trabajo termina siendo del otro. Desde ya, su opinión es importante para mí”. Entre los proyectos personales de Joaquín que aparecen en carpeta está hacer teatro el año entrante. Claro que todavía es muy prematuro hablar de la pieza y el elenco. Sin embargo, el joven confesó: “Con la tele y el teatro actualmente me queda poco tiempo para pensar en otras cosas. Hay algo para el año que viene en teatro, que se estrenaría en junio o julio”. El análisis del mundo televisivo también se abordó en el reportaje. Enseguida, Furriel dejó en claro su punto de vista: “Tengo poco tiempo de ver televisión y entiendo que para hablar debés ver tele. Sólo miro ciclos de turismo, nada más. El Bailando.... no lo tengo muy claro, pero parece una especie de reality. A mí en lo personal no me resulta atractivo, pero entiendo que a otros le pueda gustar”.
Una de las apuestas televisivas más ambiciosas e importantes llega esta noche a la pantalla chica: se trata de Caín & Abel, que debutará a las 22.30 por Telefé, con un elenco de lujo compuesto por Joaquín Furriel, Fabián Vena, Luis Brandoni, Julieta Cardinali y Vanesa González. La propuesta cuenta la historia de una batalla entre hermanos que modificará para siempre la vida de una familia entera. La antigua lucha entre el bien y el mal: los celos, la envidia, la traición, la codicia, forman parte de este relato acerca de la complejidad de las relaciones humanas, donde el amor existe a pesar de todo y lucha por prevalecer en medio de la hostilidad. Una de las cabezas visibles del staff de la tira, Joaquín Furriel, dialogó con este medio sobre varias cuestiones. A la hora de hablar de su personaje, llamado Agustín Vedia, y sobre el entorno de la historia, el intérprete aclaró: “Me parece que será una novela del estilo de Montecristo, con muchas cosas para descubrir y disfrutar, con seguridad, hay personajes bien definidos con muchos contrastes más un elenco que es un placer enorme trabajar con ellos. La trama exhibe a una familia poderosa y particular. A partir de un accidente se podrán descubrir algunos asuntos familiares. Mi personaje por un conflicto familiar se autoexilia en México y la novela comienza cuando vuelvo por un evento familiar y mediante unas cuestiones que pasan decido quedarme para entrar en zona de suspenso. Por supuesto, hay también historias de amor muy potentes con Vanesa González y Julieta Cardinali”. A las palabras de Furriel se pueden agregar otros aspectos que sucederán desde esta noche. El amor de una mujer (Vanesa González) vuelve a enfrentar a Agustín Vedia (Joaquín Furriel) con su propio hermano Simón (Fabián Vena) que, a pesar de estar recientemente casado con Pilar (Mercedes Oviedo), no la ha olvidado. El día del regreso de Furriel se producen dos acontecimientos trágicos por los cuales se empezarán a develar los turbios manejos que Eugenio Vedia, su padre (Luis Brandoni), lleva adelante en su empresa constructora, en sociedad con Gregorio (Luis Machín), su mano derecha y más fiel verdugo. Consuelo (Virginia Lago) es la discreta señora de Vedia, acostumbrada a esconder los sentimientos bajo llave. Alejado de los negocios, Santino (Juan Bautista Greppi), el menor de los hermanos, intenta diferenciarse de una familia llena de secretos pero paradójicamente irá forjando sus propias emociones clandestinas. Beatriz (Mara Bestelli), la única hija mujer de la familia Vedia, irá develando poco a poco la trama de la farsa en la que vive inmersa, donde la violencia familiar se desarrolla con absoluta sutileza. Su marido, Alfredo (Federico D’Elía) es un personaje oscuro y forma parte del costado más sangriento de la poderosa empresa familiar.
El caso Puig
Al referirse al tema, el protagonista de Caín y Abel manifestó: “Si entendemos por talento que una persona de manera innata puede hacer algo con buena aceptación, eso es un talento. Yo siento que tengo que prepararme, estudiar y elegir contextos donde pueda crecer. En ese sentido lo mío pasa por la voluntad y el trabajo”. En el plano personal, la vida en pareja con la actriz Paola Krum es algo sumamente importante en la existencia del actor y en sus acciones laborales. Por ende, él contó detalles sobre el hecho que ambos compartan la misma actividad: “Nosotros tenemos un equilibrio donde compartimos hasta el punto que la decisión final sobre una oferta de trabajo termina siendo del otro. Desde ya, su opinión es importante para mí”. Entre los proyectos personales de Joaquín que aparecen en carpeta está hacer teatro el año entrante. Claro que todavía es muy prematuro hablar de la pieza y el elenco. Sin embargo, el joven confesó: “Con la tele y el teatro actualmente me queda poco tiempo para pensar en otras cosas. Hay algo para el año que viene en teatro, que se estrenaría en junio o julio”. El análisis del mundo televisivo también se abordó en el reportaje. Enseguida, Furriel dejó en claro su punto de vista: “Tengo poco tiempo de ver televisión y entiendo que para hablar debés ver tele. Sólo miro ciclos de turismo, nada más. El Bailando.... no lo tengo muy claro, pero parece una especie de reality. A mí en lo personal no me resulta atractivo, pero entiendo que a otros le pueda gustar”.