El agresor acusó a las víctimas de robarle pertenencias de su vivienda, algo que los atacados, quienes llamaron al 911, desmintieron. Investigan que provocó el violento hecho en San Francisco Solano.
En medio de un violento episodio ocurrido en San Francisco Solano, un sujeto fue detenido luego de dispararle a dos vecinos y golpearlos con la culata de un arma a raíz de una acusación por un supuesto robo, en tanto que estos llamaron al 911 e indicaron que nada tenían que ver con el ilícito y que el agresor tiene un prontuario violento, motivo por el cual secuestraron su revólver e iniciaron el debido procedimiento judicial.
Lo que comenzó como una discusión acalorada terminó en una serie de disparos al suelo a modo de amenaza, los cuales si bien no fueron hacia el cuerpo de los damnificados, representaron un intento de homicidio claro que milagrosamente no se llegó a concretar. Además, los investigadores trabajan para determinar el móvil que llevó al violento a protagonizar tal escena, mientras se encuentra aprehendido a la espera de que se resuelva su situación.
El lamentable episodio tuvo lugar en plena vía pública, en la intersección de las calles 882 y 826, a pocos metros del Arroyo Las Piedras en Villa La Florida. Allí estaban los agredidos, dos vecinos que fueron increpados por un sujeto que también vive en el barrio. Lo cierto es que, siguiendo su relato, no esperaron jamás dicha reacción y, claramente, los tomó por sorpresa y los asustó.
Según explicaron a las autoridades policiales tras un llamado hecho por ellos mismos al 911, estaban en sus casas cuando el agresor se apersonó con una pistola calibre 9 milímetros y los acusó de haber robado pertenencias de su vivienda. Estos indicaron que nada tenían que ver con el ilícito y trataron de desligarse lo más rápido posible, pero el hombre insistió y los golpeó con la culata del arma en el cuero cabelludo provocándoles lesiones cortantes que requirieron atención.
Pero antes de marcharse, efectuó varios disparos contra el suelo a modo de amenaza y por suerte las balas no rebotaron contra los cuerpos de las víctimas, lo que podría haber sido una verdadera tragedia por una simple acusación. En sintonía, se marchó a su casa y se refugió hasta la llegada de los agentes de la Comisaría Cuarta de San Francisco Solano, que organizaron un allanamiento de urgencia, lo sacaron y lo trasladaron a la seccional a modo de detención por los daños causados.
Lo cierto es que los damnificados precisaron de asistencia médica por parte de una ambulancia con profesionales médicos del SAME y no necesitaron de un traslado a un centro de atención médica. Por otro lado, el caso quedó en manos de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 3 del Departamento Judicial de Quilmes, que ordenó el secuestro de un revólver marca Browning.
Los investigadores trabajan en el caso y esperan avances para determinar qué sucedió previamente, para desencadenar la ira del agresor.
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