A partir de una denuncia de la Comisión Provincial por la Memoria se detectaron problemas de infraestructura. Pero además una internada aseguró que un enfermero ejerce violencia sexual.

A raíz de una denuncia de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), se detectaron irregularidades en una clínica psiquiátrica situada en San Francisco Solano, que van desde torturas a sus pacientes, violencia sexual, malos tratos en general, pésimas condiciones higiénicas, falta de correcta alimentación y aplicación de medicamentos sin orden médica, entre otras falencias, mientras que si bien en principio habían desestimado el reclamo, gracias a un acta de fiscalización pudieron realizar elevar el caso a la Justicia penal.

Se trata de una causa realmente estremecedora que pone en el foco a un establecimiento de atención solanense y, siguiendo el testimonio de los denunciantes, todo se atrasó porque no entrevistaron en soledad a los pacientes. Creen que podrían temer dar su palabra, ya que después tienen que afrontar el día a día con sus agresores. En sintonía, esperan más informes al respecto y entienden que saldrían a la luz más problemas.

Todo comenzó cuando la CPM, organismo que se dedica a estudiar este tipo de centros para prevenir torturas, llegó a la Clínica de Psicopatología Phsiquis. Allí se encontraron con un edificio con serias fallas en su estructura, con muchas irregularidades y baños en los cuales no están colocados todos los sanitarios. Pero esto escaló aún más allá y vieron que el dilema era más grande todavía.

Conversaron con una mujer que les confesó que a veces los encierran a modo de castigo, les inyectan medicamentos calmantes sin la orden correspondiente de un profesional médico y que no son bien alimentados. Pero lo más crudo de su relato llegó cuando denunció a un enfermero por ejercer violencia sexual. “La posición institucional consiste en negar la situación y culpar a la víctima, revictimizando a las mujeres al exponerlas a estas situaciones de manera constante y sin intervención reparatoria”, sostuvieron desde la CPM.

Es por ello que presentaron un habeas corpus que fue desestimado por el Juzgado de Familia número 4. De hecho, lo firmaron varios médicos. Sin embargo, entienden que se hizo un paneo general y no profundizaron con cada una de las personas que están allí. Por ese motivo, en un acta indicaron que “se ha advertido la presencia de enfermeros y de otros auxiliares de salud (auxiliar de farmacia), cada uno de ellos con funciones específicas, pero interactuando con los residentes de la clínica, con buena voluntad y trato cordial”.

Ante la falta de respuestas claras y teniendo en cuenta los testimonios de serios maltratos y torturas, denunciaron el caso ante la Justicia y ahora lo lleva adelante la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio (UFIyJ) número 5 del Departamento Judicial de Quilmes. Esperan que se puntualice cada caso, para poder obtener con precisión los detalles de qué está sucediendo dentro de la clínica apuntada.

Contacto

Registro ISSN - Propiedad Intelectual: Nº: RL-2025-11499155-APN-DNDA#MJ - Domicilio Legal: Intendente Beguiristain 146 - Sarandí (1872) - Buenos Aires - Argentina Teléfono/Fax: (+5411) 4204-3161/9513 - [email protected]

Edición Nro. 15739

 

Dirección

Propietario: Man Press S.A. - Director: Francisco Nicolás Fascetto © 2017 Copyright Diario Popular - Todos los derechos reservados