El efectivo, que se encontraba de civil trabajando para una aplicación, disparó contra los adolescentes porque le habrían querido robar la moto.
El efectivo policial que mató a dos adolescentes que intentaron robarle su moto, en un hecho ocurrido en la localidad de Banfield, fue imputado por el delito de "homicidio en exceso en la legítima defensa" por el fiscal Jorge Grieco.
La acusación recayó sobre el policía Thomas Valentín Zalazar, quien para el titular de la Unidad Fiscal de Instrucción N° 8 se excedió en su accionar para impedir el robo de su vehículo. Por el momento, el policía imputado continúa en libertad mientras la causa avanza.
En un primer momento, la causa estuvo calificada como "legítima defensa", lo que eximía al policía, que trabajaba en una aplicación de reparto cuando ocurrieron los hechos, de responsabilidad en lo ocurrido.
Cabe recordar que el suceso tuvo lugar el 21 de febrero pasado, en la intersección de las Calles Godoy Cruz y Estrada, en Banfield, donde el efectivo, que se encontraba de civil, llega con su vehículo para realizar una entrega que supuestamente había sido solicitada a través de la aplicación por uno de los jóvenes.
Al llegar, el conductor fue amenazado por uno de los chicos con la réplica de una pistola Glock e intentó robarle la moto. A pocos metros del lugar se encontraba la otra víctima, a quien en la investigación se la sindica como partícipe del robo. Según la investigación, el policía se alejó unos metros, dio la voz de alto y disparó.
Samir Sebastián Carballo, de 14 años, recibió un disparo en el tórax y falleció en el Hospital Gandulfo donde había sido trasladado; mientras que Federico Naim Jalil, de 18, murió en el acto al recibir un disparo en la cabeza.
Sin embargo, familiares de Jalili aseguran que el joven no estaba involucrado en el hecho y que pasaba por el lugar, porque se dirigía a un comercio cercano donde estaba trabajando.
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