El cruce de las calles 882 y 829 es el lugar elegido por los delincuentes para desprenderse de los vehículos que roban tras sacarle todas sus partes útiles. Vecinos aseguran que el municipio no atiende los reclamos
El cruce de las calles 882 y 829 -en La Florida- se convirtió en un cementerio de autos robados, arrojados allí por el estado de abandono en el que se encuentra la zona, donde los vecinos reclaman constantemente al municipio que realice tareas de limpieza y mantenimiento para evitar la contaminación y las inundaciones.
No sólo los delincuentes aprovechan para descartar aquello que no les sirve, además arrojan todo tipo de basura, motivo por el cual el barrio se encuentra plagado de ratas que asustan con su gran tamaño. La mayor parte de esos desechos van a parar a las zanjas. Por eso, cada vez que llueve, "el agua no drena correctamente, se desborda y llega hasta las casas".
El Quilmeño recorrió el vecindario y constató que las quejas de los vecinos poseen amplios fundamentos. "Hace un tiempo atrás, se reunía la gente y sacaban los autos desguazados hasta el medio de la avenida San Martín, entonces la Municipalidad venía enseguida y los retiraba para que no complique el tránsito", recordó Mariela González en diálogo con este medio.
"Ahora ya no se hace más, por eso se acumulan durante meses las autopartes tiradas acá, frente a las casas, en especial contra el paredón de la empresa metalúrgica que está en San Martín y 882", añadió González.
Mugre e inundaciones El fin de semana pasado, los vecinos casi linchan a un hombre que llegó junto a su familia en un camión y descargó una montaña de residuos. "Salimos a la puerta todos y le exigimos que levante todo. Si no lo hacía, los muchachos lo iban a matar", contó Inés Gómez, una vecina que vive en el sector más crítico.
Situaciones similares se repiten a menudo, sin que los propietarios puedan evitarlas. De esta manera, la basura se acumula, principalmente en las zanjas. "El municipio nunca limpia, pedimos el zanjeo pero no hay respuestas. Cuando llueve se desborda el agua y termina adentro de las casas", remarcó Gómez.
"Para colmo, quedaron sin asfaltar unas cinco cuadras del barrio (en las calles 882 y 829), que se tornan intransitables cuando desbordan las canaletas", agregó. Los vecinos van a volver a reclamar a la Comuna de Quilmes para que realice tareas de mantenimiento y limpieza en esa zona de La Florida. La inseguridad también preocupa A los basurales y el cementerio de autos robados, en La Florida, se suma que los vecinos deben caminar por la calle en permanente estado de alerta.
Según contaron, la parada de colectivos de avenida San Martín y 882 -llamada "la parada de los robos"- es el punto preferido de los delincuentes para asaltar a quienes esperan en soledad. Tanto los que pretenden abordar un micro como los que descienden, deben contar con una compañía, especialmente las mujeres.
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