La vuelta a la rutina luego de las vacaciones puede ser traumática: después de varios días de estar panza arriba al sol o en el sillón cuesta mucho volver a engancharse en la vorágine diaria.
Pero no sólo los adultos sufren este cambio repentino. Para los más jóvenes de la familia vuelve la época de clases, diagnósticos y exámenes, y a ellos también les cuesta reincorporarse al día a día.
La correcta alimentación es uno de los factores clave: según consultó Diario Popular, otorga importantes aportes al normal y eficaz desarrollo del aprendizaje, aportando de esta manera todos los nutrientes necesarios para que el cuerpo desempeñe sus funciones vitales.
"El cerebro humano está formado por neuronas que se comunican entre sí a través de sustancias químicas llamadas neurotransmisores", explicó a Diario Popular el doctor en Nutrición y Alimentos de la Universidad de Chile Rodrigo Valenzuela Báez, quien detalló que "el aprendizaje, una de sus funciones más complejas, requiere un nivel de concentración y alto estado de alerta para poder captar la información del medio, analizarla y almacenarla para usarla cuando sea necesario".
El especialista brindó una lista de cinco alimentos que no deberían faltar en una dieta adecuada, si se apunta a reforzar la atención:
*Huevo: la yema presenta nutrientes como la colina, que favorece al mantenimiento de la capacidad de la memoria y la luteína y zeaxantina, que ofrecen beneficios para la vista y previenen la degeneración macular.
*Jurel, atún y salmón: estos peces contiene DHA, un ácido graso fundamental y muy importante de la familia de los Omega-3. Su ingesta está asociada a un buen desarrollo cognitivo y a un mejor rendimiento en cuanto a memoria y habilidades de aprendizaje. Según estudios científicos, captación de DHA ya preformado (consumido como tal) por el cerebro es significativa entre los 2 y 5 años de edad y soporta la acumulación sustancial del DHA por parte del cerebro durante este periodo crucial de crecimiento.
*Carnes rojas (preferentemente magras): aportan, entre otros nutrientes, hierro, un mineral necesario para combatir problemas de concentración y de anemia.
*Pescados y mariscos: ayudan a incorporar yodo, un nutriente que favorece a la correcta actividad neuronal.
*Yogures y lácteos en general: aportan calcio y proteínas de alto valor biológico que favorecen un adecuado crecimiento óseo y un funcionamiento muscular normal.