Tenis
Su condición física seguirá siendo un caso latente por lo que resta de la temporada y el tema es saber si de aquí a fines de noviembre logrará mejorar su margen de recuperación para poder tenerlo en mayor plenitud.
Puede Argentina ganar la Copa Davis con Juan Martín del Potro? ¿Con éste Del Potro, que viene readaptándose a pasos más firmes que lo previsto hasta por él mismo, y que todavía corre con cierta desventaja en relación a jugadores top aun habiéndolos derrotado? Son inquietudes horas después del gran logro en Glasgow ante Murray y compañía, donde la presencia del as de espadas del equipo argentino fue absolutamente determinante. Pero lo visto ante Gran Bretaña, ¿alcanzará contra Marin Cilic y los suyos en la final de fines de noviembre, o se necesitará de un Del Potro en un mayor nivel que es impredecible saber si alcanzará en esta etapa?
A Del Potro, su readaptación al juego tras la larguísima inactividad lo empujó a buscar variantes para cubrir sus déficits y debido a ello concreta lo que hace años se le reclamaba, que si quería dejar de ser un simple top-ten y pelear por el "uno" debía meterse adentro de la cancha para pegar, salir del centro y sumar idas adelante para volear y complementar su derecha, su servicio y su otrora revés a dos manos con un top impecable que todavía le falta recuperar y que por ahora pasó de evitarlo a usarlo para "empujar" la pelota cada vez con más profundidad, como el slice mismo, que ahora va al fleje del fondo y no corto como hace meses y era convite al ataque rival.
El gran tema de Del Potro es su recuperación entre partido y partido. Contra Murray jugó cinco horas ardorosas y demostró que no estaba para eventuales cinco sets dos días después. No fue "arrugue" de su parte ni capricho o mala idea del capitán Orsanic, fue algo real y atendible. Algo parecido se vivió con David Nalbandian en la semifinal ante Rusia en el estadio del Parque Roca, hace exactamente 8 años, cuando por empecinarse en jugar los tres días, un dobles con Cañas perdido en cinco sets lo "arruinó" para la mañana del domingo, donde Davydenko se hizo un pic-nic con él y un joven Del Potro salvó la serie, en aquella tarde de su recordada frase "vamos a ver si podemos sacarle los calzones del orto a Nadal" por la final contra España a la vista...
En Delpo, el físico seguirá siendo un tema a monitorear. Por eso, reafirmamos la inquietud: ¿Puede ganarse la Davis con Del Potro modelo 2016?