Ubicado sobre el río Salado, esta localidad cuenta con varios atractivos como el Bosque Encantado, las termas y una ribera que pueden aprovechar quienes quieren disfrutar del aire libre y el esparcimiento o para hacer deportes náuticos o la pesca. A pocos kilómetros de Capital, se trata de uno de los lugares más elegidos para las tradicionales "escapadas" de fin de semana.
El Bosque encantado, un lugar rodeado de naturaleza; los balnearios del Río Salado, un complejo termal ideal para dejar de lado el estrés, son algunas de las opciones que ofrece General Belgrano, un lugar ideal para el descanso, ya sea en las vacaciones o para una escapada de fin de semana.

Esta región de la zona central de la provincia de Buenos Aires, tiene en el Río Salado una área que concentra lugares de esparcimiento para disfrutar al aire libre, junto a confiterías y restaurantes. Este curso de agua nace en la laguna El Chañar, ubicada en la provincia de Santa Fe y desemboca en el litoral bonaerense del Río de la Plata. Recibe usualmente el nombre de río Salado Bonaerense porque más de 95% de su curso discurre de oeste a este por el centro-Norte de la Provincia de Buenos Aires.

La costanera de General Belgrano se extiende aproximadamente a 4 kilómetros del centro de la ciudad, en el que se localiza el área que concentra los mejores recursos y equipamientos para disfrutar de un día al aire libre. Este sector cuenta con dos balnearios: "Viejo" y "Nuevo"; el primero abarca desde la pasarela hasta la zona conocida como el "Arroyito" y el "Nuevo", de unas cinco hectáreas de extensión, donde se construyó un natatorio, canchas de basquet, fútbol, voley y confiterías.

Bosque encantado

Ubicado sobre la Ruta Provincial Nº 41 y a tan solo 13 kilómetros del casco urbano, camino a Pila, se encuentra el "Paraje Colonia el Salado" y el Bosque Encantado. En esta reserva, que perteneció a la ex Estancia Santa Narcisa, se encuentra un magnífico bosque de más de 23 hectáreas, con añosos robles, magnolias, laurales, acacias, eucaliptos y otras plantas exóticas centenarias que lo convierten en un paseo imperdible.

Es una reserva natural, cercada por senderos sinuosos que van descubriendo más de 50 especies arbóreas con infinidad de vegetación con características propias de un bosque tropical, la mayorías con más de 100 años de antigüedad.

La reserva cuenta con una rica historia que se remonta a la mitad del siglo pasado, rodeado de la majestuosidad de ese Bosque Encantado, como se lo comenzó a denominar en la década del '60, se encuentra el imponente edificio restaurado de la vieja casona de la estancia y adaptado para convertirse en el Museo de las Estancias, donde se rescata un importante tramo de la historia lugareña regional.

Termas del Salado

Con aguas hidrotermales de alta mineralización, las Termas del Salado son otra de las atractivos que ofrece General Belgrano; poseen un alto porcentaje de sodio, calcio y sulfatos, que surgen de una perforación de 965 metros de profundidad a una temperatura en boca de pozo de 41º centígrados, con una óptima calidad y con una ubicación geográfica privilegiada con respecto a los centros emisores de turistas más importantes del país.

Entre los servicios que cuenta el lugar se encuentran piletas semicubiertas y cubiertas, vestuarios, baños y duchas, sectores de descanso con quinchos, servicio de guardavidas y vigilancia policial. A estos atractivos hay que agregarle los museos que hay en la ciudad, como el ferroviario 'Rieles del Salado', a 16 km. de la ciudad, es una estación ferroviaria inaugurada en 1872, ubicada en el paraje rural homónimo. El Museo de las Estancias, en el antiguo casco de Estancia Santa Narcisa fundada en 1870; se encuentra en el paraje Colonia El Salado, sobre ruta 41, a 13 km. de la ciudad de Gral. Belgrano. El Museo Histórico Municipal 'Alfredo Enrique Múlgura' está en el edificio donde funcionó uno de los primeros comercios de la localidad, la panadería El Cañón, que se mantuvo en el rubro hasta el año 1970 y luego fue restaurado para que actualmente sea uno de los lugares históricos por excelencia del lugar.