En el programa "No se puede vivir del amor", de lunes a jueves en la OnceDiez a la medianoche, el periodista muestra su faceta como entrevistador.

De lunes a jueves a la medianoche, Franco Torchia deja de lado las peleas con Martín Amestoy, sus airados editoriales sobre temas de diversidad sexual y violencia de género, el tonito agudo que pone cuando se enerva, y muestra su mejor faceta: la de entrevistador. Lo hace en su programa "No se puede vivir del amor", en la OnceDiez, AM 1110. Y está feliz de haberle encontrado el horario justo y el timming adecuado al ciclo que comparte con Teresita Ferrari, periodista de vasta trayectoria en gráfica, radio y TV. "Empezamos en la Radio de la Ciudad en 2013 a las 18 horas, pero enseguida nos dimos cuenta que el programa era para la medianoche. Este es un programa de vínculos, de relaciones, con mucho anclaje en la diversidad sexual. Todo esto en un contexto de show, sin solemnidad", señala en el marco del lanzamiento de la temporada 2015 de medios públicos de la ciudad.

"Al oyente no lo dormimos, no es un somnífero nuestro programa. Por el contrario, es un programa que te deja muy enchufado. Queremos que la gente permanezca muy activa. Con Teresita Ferrari hemos formado un buen dúo y estamos muy felices. Tanto que tuve oportunidad de irme de la radio pero elegí quedarme por múltiples beneficios, pero sobre todo por la capacidad que tienen de dejar que te manejes con muchísima libertad. El nuestro es un programa zarpado. Pero zarpado con una orientación. Implica vincularse con un vocabulario, con unas conductas sociales, que a priori pueden parecer zarpadas. Y no es poco que te dejen hacer un programa así en una radio pública".

-¿Qué diferencia hay entre el Tochia de la TV y el de la radio?

-A grandes rasgos soy el mismo, soy un bicho raro en la TV y la radio, soy una persona compleja con una psiquis muy especial. Hoy estoy en Zapping, un programa con un altísimo contenido de humor y yo he reforzado ese aspecto y he retomado el tema de la ironía para el panel. No tiene mucho que ver con lo que hago en la radio, pero en el fondo me siento el mismo. Solo que en la TV potencio unos aspectos y callo otros. En la radio, sobre todo en las entrevistas, puedo explotar otros aspectos míos.

-¿Hacés "proselitismo de la causa gay" como diría el papa Francisco?

Bueno, esa frase es lógica con una postura histórica de la Iglesia. Yo creo que en Zapping lo que hago es parte de un juego, pero acá hay que decir cosas en serio. Están las leyes de matrimonio igualitario y de igualdad de género, pero también hablo de la ley contra la violencia y anti discriminación que está parada en el Congreso. La TV tiende a dejar muy mal parada a las mujeres y a mí eso me irrita mucho.

-¿Quien fue tu gran dador de oportunidades?

-En la TV, Santiago del Moro y en la radio Baltazar Jaramillo. Hacía muchos años que no hacía radio y me encantó este regreso en una propuesta como ésta.

- ¿Podés contarnos alguna anécdota puntual de tu vida de conductor de radio, alguna charla especial o la sensación de haber sido "útil para"?

-Ayer (N de R: por el lunes) dialogamos con Pablo Silva y Juan Castro, la primera pareja gay del país que legalmente logró adoptar a dos hermanos misioneros. Es la primera vez que la Justicia le otorga a una pareja del mismo sexo a dos hermanos y determina que no se separen. Esta charla, ocurrida a 12 horas de esta entrevista me conmocionó por el poder de esta historia de amor. Y por la cantidad de trabas que una institución como la Justicia sigue poniendo a la hora que esto ocurra en manos de dos hombres. Creemos que estamos nadando en aguas muy tranquilas con respecto a la no discriminación y la no violencia, pero todos los días muere una mujer cagada a palos. Hay mucho por hacer todavía. Se vienen nuevos tiempos políticos y hay que estar muy atentos a que muchas iniciativas no caigan.

Puesto a soñar en qué quisiera que derive su carrera, Franco tiene en claro su objetivo: "A mí me gustaría ser entrevistador, es aquello para lo que me siento especialmente preparado. En Youtube podés ver Entrevistas por Cinco Pesos, un programa de entrevistas callejeras en donde personas comunes que van por la calle me dan 5 pesos, se sientan en una mesa y conversan conmigo 5 minutos. Me veo muy cerca de eso, de entrevistar en formatos novedosos. La entrevista está muy bastardeada, pero creo que sencillamente, la entrevista depende de quien está entrevistando. El humor y la ironía son una herramienta del pensamiento. Yo pasé mucho tiempo sin divertirme en Intratables, escuchando hablar de economía y política como si no fueran un mamarracho. Es menos mamarrachesca Vicky Xipolitaks que tantísimos personajes de la política. Zapping me permitió volver a divertirme, volver a jugar. Y en la radio, puedo hacer mis entrevistas.

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