Los Amantes de La Boca mantienen su consagración

A comienzos de febrero, Porteño del Sur pudo hablar con Facundo Carman, uno de los fundadores de Los Amantes, que en aquella ocasión explicó que estaban muy contentos de que, después de 15 años, le haya tocado a su barrio ser una de las sedes del corso evaluador.

La murga obtuvo 475 de los 480 puntos en juego por parte de los jurados, a lo largo de las ocho performances que realizaron en ambos barrios durante cuatro fines de semana.

De esta manera, los Amantes lograron superar a otras agrupaciones muy bien consideradas como El Rechifle de Palermo, Resaca Murguera de San Cristóbal, los Relegados de Belgrano, Los Nenes de Buenos Aires, Los Linyeras de la Boca, Los Magos de Saavedra, Los Pitucos de Villa del Parque y Devoto, Los Cometas de Boedo, entre muchas otras, que también participaron como lo hacen año a año.

‘Estamos muy contentos porque realmente esta vez no lo esperábamos. Fueron cuatro años de salir primeros y por suerte en esta oportunidad pudimos cumplir el sueño de salir primeros una quinta vez’, le dijo a Porteño del Sur Pablo ‘Pata’ Smerdel, co fundador junto con Carman de la murga.

Luego del tamaño esfuerzo que significa liderar una murga de más de 400 integrantes, tanto Carman como Smerdel están exhaustos y por eso planean tomarse un par de meses de descanso ya que según ‘Pata’, ‘este es el tiempo ideal’. De todas maneras, los más pequeños continuarán con las prácticas durante los próximos meses ya que, además de aprenderse todas las coreografías, también hay que realizar un monitoreo constante a temas como la vestimenta; y mantener activa una maquinaria que para movilizarse requiere de 10 micros y dos camiones en los que transportan el equipo.

El descanso no durará demasiado ya que tanto Carman como Smerdel prevén que en septiembre ya estarán ‘a full’ con los ensayos y los preparativos, a sabiendas que la segunda mitad del año va ‘en bajada’. ‘Además, siempre hay ritmos, banderas, fantasía y carros que revisar. En la murga siempre hay detalles en los que innovar’, concluye Smerdel.

El corso evaluador se lleva a cabo en la ciudad de Buenos Aires desde el año 2003, luego de que la Legislatura declarara a las murgas porteñas como ‘patrimonio cultural’. Desde ese momento, se creó la Comisión de Carnaval, que depende del ministerio de Cultura del Gobierno de la Ciudad, y que es la que selecciona los jurados que participarán entre artistas y otras personalidades de la cultura.

Desde entonces, casi todos los 30 corsódromos de la ciudad han sido seleccionados como corsos evaluadores, y en los mismos han desfilados las más de 100 murgas porteñas. Durante las cuatro semanas que dura el carnaval, las murgas que participan del corso evaluador buscan sumar puntos para alcanzar o permanecer en la categoría ‘A’ que les permite a su vez obtener más ‘salidas’ para realizar sus performances y poder así cobrar un cachet que sustente su estructura.