El organismo necesita unos 2 miligramos diarios de vitamina A y la zanahoria contiene entre 4 y 10 mg. por cada 100 gramos. Esto resulta fundamental para proporcionar un desarrollo armónico del cuerpo de los niños. También facilita la secreción de leche materna; previene los procesos degenerativos de la piel y regula los intestinos gracias a que son ricas en fibra. A su vez, equilibra la secreción biliar y favorece el aumento de glóbulos rojos.
La zanahoria es famosa desde la antigüedad por sus propiedades para reforzar y agudizar la vista. También actúa como una eficaz protectora de la epidermis, sobre todo cuando la piel se expone a los rayos solares. Debido a que posee gran cantidad de carotenos, también favorecen el bronceado. Además los carotenos tienen grandes virtudes dietéticas ,y protegen a la piel de la influencia negativa del sol, la mantienen hidratada y le proporcionan un tono bronceado. La zanahoria es, después del perejil, considerada el alimento con mayor proporción de beta carotenos. Pertenece al grupo de caretanoides, formado por más de 600 compuestos naturales. Desempeña un papel muy destacado porque actúa como un precursor de la vitamina A, y puede transformarse en esta vitamina cuando lo necesita el organismo.
En cuanto a la cebolla, es un alimento bastante habitual en la mayoría de las culturas. y no se tienen muy en cuenta sus propiedades y la importancia del aporte de nutrientes para el organismo. Posee numerosas propiedades, sobre todo si se consumen crudas, ya que la mayor parte de sus efectos terapéuticos están en las sustancias volátiles que son las que hacen llorar cuando se las corta. Aquellas personas que no toleran la cebolla cruda pueden sazonarla con aceite de oliva que le da un sabor menos picante, o bien comer poca cantidad o ingerirla levemente cocida.
La cebolla causa un efecto alcalinizante sobre el organismo, y lo ayuda a remineralizar y eliminar las toxinas con más facilidad. Está considerada como un buen diurético y aconsejada cuando hay edemas, hinchazones o cualquier problema de las vías urinarias. Para los hombres resulta beneficiosa para la próstata y también ayuda en el reumatismo, ya que favorece la eliminación de ácido úrico. Tanto el azufre como los flavonoides que posee, le confieren un gran poder bactericida y la convierten en un gran desinfectante natural. En casos de gripes, resfrío y otras infecciones siempre será de gran ayuda la ingesta de cebolla.
El sistema nervioso se beneficia con el contenido de fósforo y azufre de la cebolla. Por eso se recomienda su ingesta a personas con depresión, agotamiento o insomnio. Para las arterias es un alimento ideal, gracias a sus minerales favorece la elasticidad y mantiene a las arterias limpias de grasas como el colesterol, por lo que se la recomienda en casos de problemas cardiovasculares así como en la hipertensión.