Las ventajas de los productos elaborados con ingredientes vegetales y el modo de distinguirlos de aquellos en los que predominan los elementos sintéticos. Además, por qué pintarse en exceso termina siendo contraproducente
El exceso de maquillaje y el uso de productos que se comercializan como naturales en su totalidad, cuando en realidad no lo son, podrían perjudicar nuestra piel y hacer que presentemos un aspecto poco natural. Algunos trucos de maquillaje y opciones para tener en cuenta a la hora de comprar un buen cosmético que no arruine la salud de nuestra piel.
El maquillaje es nuestro aliado número uno para vernos espléndidas, pero cuando nos aplicamos demasiado, el exceso se nota y puede ser contraproducente ya que nuestro rostro se verá poco natural. Por eso, en el momento de maquillarnos hay que prestar especial atención y cuidado. No por aplicarnos demasiado maquillaje lograremos vernos más jóvenes y atractivas. También hay que prestar atención especial a los colores de moda. Usarlos, pero siempre cuidando la naturalidad en nuestro rostro.
Cuando estamos bronceadas se requiere mucho menos maquillaje para vernos bien, este es el tiempo donde las bases y polvos pasan a un segundo plano, allí es donde debemos resaltar las sombras y darle el protagonismo que se merecen, asi como también los labiales.
Muchas veces no salimos de los tonos clásicos como los marrones y grises, sin embargo hay que atreverse a usar los rosas, naranjas, así como también el turquesa y verde que siempre están de moda.
Las sombras ocupan todo el párpado superior en un solo tono que se repite delineando debajo por dentro o por fuera del párpado inferior. Pero cuidado. No tenemos que lucir escandalosas, todo deberá armonizar con nuestro vestuario. Hay que animarse a salir de lo tradicional sin quedar como una mascarita y poco natural.
Los colores pasteles son una buena opción para comenzar. En la boca, un brillo suave si estamos bronceadas o un color cremoso claro con reflejos fucsia. En cuanto a la piel, los satinados bajan su voltaje y los pómulos se mantienen brillantes pero sin excesos.
Los colores cálidos, como rosas o naranjas suaves, que muchas veces no utilizamos, le darán una importante luminosidad a la cara. Si tenemos boca grande, no necesitaremos resaltarla demasiado y lo mejor será usar solo brillo, que dará un toque de atención pero que a su vez nos permitirá jugar con las sombras en los ojos. Por otra parte, hay que procurar utilizar solo un tono de sombras, tanto en el párpado superior como en el inferior, ya que el cambio abrupto será demasiado para esa zona.
Cada vez hay más laboratorios que elaboran sus cremas, lociones y champús con ingredientes vegetales elaborando auténtica cosmética natural y en la actualidad, según los expertos existen nuevos productos cosméticos, para el cuidado de todo el cuerpo. Pero también hay fabricantes que aprovechándose de la moda “de lo natural” utilizan como publicidad algún ingrediente vegetal que añaden en pequeñas proporciones a sus composiciones sintéticas, y venden su producto como 100 por ciento natural cuando en realidad no lo es.
Por eso hay que saber, que la auténtica cosmética natural tiene que estar elaborada con ingredientes de origen vegetal junto a algún conservante suave para garantizar su durabilidad.
La cosmética natural ofrece enormes ventajas para la salud de la piel, porque además de no ser agresiva, fortalece y mejora las funciones dérmicas gracias a los componentes químicos naturales de las plantas. La cosmética elaborada con materias naturales no tiene efectos secundarios y no produce alergias, las cuales aparecen cuando se utilizan cosméticos con colorantes o excipientes demasiado agresivos para la piel.
Los productos tienen que mencionar en su envase los ingredientes que los componen y, también, las precauciones de su uso Todos los cosméticos tienen que establecer una fecha de vencimiento y ésta debe figurar en el envase. Siempre es conveniente probar el producto en alguna zona del cuerpo no sensible o simplemente observar si algún ingrediente puede causar una reacción adversa sobre la piel. Si ocurre alguna irritación, hay que comunicarlo inmediatamente al vendedor o al fabricante y también a la autoridad encargada del control de seguridad en el país. Por último, conviene prestar atención a los productos que prometen soluciones milagrosas, como las cremas contra las arrugas o la celulitis, ya que, en algunos casos, pueden provocar otros efectos.