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Sin margen para el error Independiente recibirá a Quilmes en el
Libertadores de América con el único objetivo de sumar de a tres para
quebrar la racha de doce juegos sin triunfos.
No será fácil esta empresa de llevar al Rojo fuera de la zona complicada de promedios. Al menos le va a demandar un tiempito más de trabajo al Tolo y desde ya que el paso en falso en Mendoza, tierra del buen vino, dejó con la boca seca a un Independiente que hace doce fechas que no levanta la copa para festejar un triunfo. Américo Gallego tendrá que ajustar algunas piezas y pensar en que ante Quilmes el Diablo necesita tomarse una buena cerveza que apague el fuego que pretende consumirlo y vivir el sabor del encuentro con el triunfo.
Más allá de las publicidades cerveceras el Tolo le sacó la ficha a cada integrante del plantel y entendió de manera inmediata los puntos básicos por los cuales el equipo flaquea y no consigue sumar. Sin lo polémico que supo ser en otros tiempos el entrenador dejó caer una fuerte crítica al estado físico de los muchachos quienes no pudieron conseguir terminar de pié o en condiciones aceptables los noventa minutos. No por nada el punto se escapó en el cierre del encuentro. Por eso el trabajo de la semana también estará enfocado en intentar recuperar cositas que no se lograron durante la pretemporada y que el entrenador considera vitales para sacar todo adelante.
La derrota fue un golpe más en un plantel que tiene la guardia baja pero el Tolo es un boxeador de mil peleas y fue el primero que la levantó. Se bancó todo el peso y además les abrió los ojos a cada integrante del plantel. Marcó la cancha y dejó bien en claro que quien no esté para jugarse la vida por el grupo va a mirar todo desde afuera.
Con reglas claras y muchos cambios debido a lesionados Américo Rubén Gallego saldrá a jugar su primera gran final frente a Quilmes. No importa si los tres puntos vienen en chop, lata o porrón. El objetivo es cortar la racha negra de doce sin triunfos y devolverle la confianza a un equipo que tiene un objetivo de treinta puntos. Independiente quiere volver a saborear un trago de victoria para que sus sueños de escapar de la zona complicada dejen de ser pura espuma.
Con reglas claras y muchos cambios debido a lesionados Américo Rubén Gallego saldrá a jugar su primera gran final frente a Quilmes. No importa si los tres puntos vienen en chop, lata o porrón. El objetivo es cortar la racha negra de doce sin triunfos y devolverle la confianza a un equipo que tiene un objetivo de treinta puntos. Independiente quiere volver a saborear un trago de victoria para que sus sueños de escapar de la zona complicada dejen de ser pura espuma.