La primera actriz de origen afroamericano en ganar un Oscar interpreta en su nuevo film a Jordan, una operadora del 911 que recibe una llamada de una joven que fue secuestrada. Juntas trabajarán para atrapar a un asesino.
Halle Berry disfruta la charla. Vive el momento sin la obligación del marketing y le pone pasión a cada respuesta. "Es la primera vez que vengo a este lado del mundo. Es mi primera vez en Argentina", dice con una sonrisa que deja ver una dentadura impecable, blanca, inmaculada, propia de las mujeres afroamericanas. Llegó a nuestro país para presentar 911 Llamada Mortal, su última película y la primera que la tiene como protagonista excluyente.
Berry interpreta a Jordan, una veterana operadora del 911 que recibe una llamada de una joven que fue secuestrada y que casi sin querer se convertirán en socias para atrapar a un asesino. "Es un papel muy intenso, difícil de interpretar pero que valió la pena el desafío", cuenta. Este nuevo trabajo dista mucho de lo que fueron sus papeles en las películas más recordadas. Berry fue una de las chicas sensuales de James Bond, hizo de Gatúbela y ganó un Oscar gracias a su papel de mujer desesperada en Monster Ball, pero ahora participa en un film donde su sensualidad no es explotada, sino sus dotes de actriz.
"Desde el comienzo de mi carrera traté de hacer diferentes roles, no quiero quedar encasillada en un solo papel. La verdad es que fue difícil porque yo venía del modelaje y me tomaban como una cara bonita. Entonces cada rol en el que se necesitaba una cara bonita ahí me llamaban y la verdad es que no es eso lo que quiero. Yo me formé no sólo para hacer de chica bonita", aclara.
En la película es clave el servicio del 911, el sistema de emergencias más grande del mundo. Berry visitó las oficinas para darle vida a su personaje y se encontró con un mundo apasionante, del que nunca podrá olvidar. "Fui a un centro de emergencias para tratar de tomar diferentes aspectos a la hora de formar mi personaje y quedé sorprendida. En primer lugar con el tamaño de la central. No sé por qué pero me imaginaba un lugar pequeño, con muy poca luz y me encontré con un lugar gigante. Había muchas personas y de toda variedad: hombres, mujeres de color, gente en sillas de ruedas, distintos tipos de personas. Todos tenían una gran calma interior, todos hablaban lento, con tranquilidad y muy claro. Creo que esto es importante en la tarea que ellos desempeñan", dice.
Ese rol determinante de la operadora es muy frecuente en Estados Unidos. Al 911 se lo usa de contención y guía a la hora de un momento de tensión. En nuestro país aún no hay un sistema aceitado y quedó en evidencia a la hora de pasar por una tragedia tan devastadora como las inundaciones. Halle Berry no estaba ajena a lo que vivió el país y a la hora de hablar del tema mostró su costado solidario: "Me enteré de la tragedia que están viviendo en el país y lamento que el sistema no funcione a la perfección. En Estados Unidos el sistema funciona muy bien. Creo que las personas que trabajan en el 911 son héroes, salvan vidas. Tienen un rol muy destacado dentro de nuestra sociedad. Un año antes de filmar esta película me tocó en persona llamar al 911 porque alguien estaba entrando en mi casa. Esta persona me ayudó a esperar a la policía y manejar la situación mientras estaba en el teléfono con ella", contó.
La versatilidad en su carrera fue una constante. Luchó durante más de veinte años por conseguir un lugar de privilegio en la industria del cine y hoy siente que llegó, aunque en el camino hubo mucho sufrimiento. "No es fácil. Creo que las mujeres en el cine fuimos desplazadas. En la década del 50 muchas mujeres tenían papeles importantes en Hollywood y hoy tenemos que recuperar ese liderazgo", dice reivindicando el género femenino. Pero ese desplazamiento no sólo se dio en la mujer, sino también en los hombres, quienes se quedaron con grandes producciones de muy buena facturación, pero perdieron la calidad interpretativa. "Los hombres tienen que ayudarnos. Hoy a ellos también se les hace difícil. Cambió el negocio, está faltando la creatividad, algo tan importante en la industria del cine. Creo que se dejó de lado esa creatividad para ganar dinero y eso no es bueno".
La morocha tiene todo. Glamour, una sonrisa atrapante, una mirada tierna y una belleza natural que la pone como una de las más sexies del cine. Otra estrella que iluminará Buenos Aires por unos días...
Energía especial con el Papa argentino
La noticia del nombramiento de Francisco como Papa dio la vuelta al mundo. Halle Berry también dio su punto de vista sobre el primer Sumo Pontífice latinoamericano. "Cuando arreglé mi viaje a la Argentina aún no se sabía lo del Papa. Al enterarme de la noticia supuse que iba a encontrar un ambiente diferente y no me equivoqué. Hay una energía especial, la gente se muestra diferente, con más sensibilidad. A pesar de no ser católica celebro la designación del Papa", dijo. Berry es una luchadora incansable y abanderada de varias causas en contra de la discriminación. Que un latino haya llegado a lo más alto de la Iglesia, es dato que celebró más allá de su inclinación religiosa.
comentar