La modelo podría encabezar un nuevo programa en la mañana de dicho canal junto al periodista; así, coronaría un buen momento laboral que se suma a su participación en el Bailando.
Karina Jelinek está pasando por su mejor momento laboral. Del sentimental, después de la escandalosa separación de Leonardo Fariña todavía no se pudo recuperar. Como dice el dicho, la modelo tiene mala suerte en el amor, pero un brillante futuro laboral.
A su participación de la pista de baile de Marcelo Tinelli, se acaba de sumar el exitoso estreno de su primera película con Los Bañeros 4 y, por si fuera poco, en El Trece la acaban de convocar para formar equipo en el nuevo programa de Fabián Doman, que será un magazine por la mañana.
Jelinek debutaría en calidad de panelista. Por decirlo de algún modo, ella ahora pasará del otro lado del mostrador con una columna, supuestamente, de moda en el ciclo Somos Nosotros al Mediodía, de 11.30 a 13.
La idea de la emisora de Constitución que compita con el final del magazine de casi una década, AM, y con Los Simpsons, con un promedio de 4 y 6 puntos respectivamente.
El staff se completa con el doctor Alberto Cormillot, vuelve a la pantalla Maru Botana después de su paso sin pena ni gloria de Sábado en Casa junto a Sergio Lapegüe. La periodista del noticiero Sandra Borghi y el humorista Ariel Tarico, un referente en la materia de radio Mitre.
Ayer en Este es el Show, la dupla Paula Chaves y José María Listorti, abrió el ciclo sobre los pasos de Jelinek: "No viajó a Estados Unidos como tenía previsto, ¿podrá bailar si llega a sentencia?". Ellos dejaron picando la duda.
Pero con Jelinek está todo bien tanto con la producción de Marcelo Tinelli como del canal porque la modelo subirá unos cuantos escalones en el canal. ¿Seguirá los pasos de Pamela David?
Jelinek ¿cumplirá el sueño de convertirse en una intelectual? Además de mostrar su espectacular físico también Jelinek deberá desempeñarse en el contexto de un magazine. Si bien no tiene la estructura compacta y estructurada de un noticiero, el formato exige ciertos códigos a respetar cómo la forma y el contenido de lo que uno argumenta