No Te Va Gustar le puso calor a la noche del sábado

La excusa fue la presentación de El Calor del pleno Invierno, su último disco. Con un sonido impecable, cinco pantallas gigantes que facilitaron la visual de la multitud, y una puesta en escena simple y minimalista (apenas un cubito gigante con un fósforo dentro colgando del centro del escenario, reflejando el arte de tapa del reciente álbum), NTVG reafirmó ese cariño que tiene con el público argentino con un show inolvidable y perfecto, que a lo largo de 30 canciones repasó buena parte del último trabajo (sonaron 10 de los 14 temas), rescató algunas piezas perdidas (caso La Soledad, incluida en Este Fuerte Viento que Sopla, su segundo álbum de 2002); tributó a ese juglar charrúa llamado Fernando Cabrera con la versión de Te Abracé en la Noche (elegida como primera canción de los dos bises; la otra fue No Era Cierto, pieza habitual para cerrar los shows) y no dejó afuera ninguno de esos clásicos que se cantan tanto arriba como abajo del escenario y hoy, después de 20 años de carrera, ya no sólo por las voces femeninas más juveniles, sino por ese variopinto abanico de edades que empezó a acompañar al combo uruguayo en los últimos 5 años.

Así fueron sonando Clara, Cero a la Izquierda, Chau, Fuera de Control, Verte Reír, Angel con Campera, Pensar y El Camino, entre otras. Familias enteras dijeron presente para disfrutar de una banda que fue creciendo con el tiempo y que hoy, por la enorme convocatoria que tiene, pide a gritos un show en un estadio de fútbol. El predio de Costanera Sur se ha mejorado (de hecho se colocaron dos plateas tubulares a ambos costados del escenario y se ampliaron los ingresos) pero la visual no es la misma que en un Vélez, un estadio Unico de La Plata o un River Plate. El otro punto alto de la noche estuvo en los invitados especiales, no por la cantidad sino por la calidad: Fernando Ruiz Díaz, de Catupecu Machu ("un amigo al que conocimos no hace mucho tiempo pero quisimos desde el primer día", señaló Brancciari), quien cantó Mil Díaz; Chano Moreno, de Tan Biónica, para sumar su voz en Al Vacío y el ex Los Piojos Andrés Ciro, la gran sorpresa de la noche.

Cuando la lista de temas entregada a la prensa marcaba el momento del superhit Tan Lejos, un sonido de armónica arrancó con los primeros acordes de Tan Solo (himno piojoso si los hay) y recién después de la primera estrofa, la voz y la presencia de Ciro se sumó a la de Brancciari para juntos revivir un clásico inoxidable y crear, quizás, el mejor momento de la noche. La frutilla del postre fueron las 30 toneladas de elementos de limpieza juntados para las víctimas de las inundaciones.