El romance entre ambos no sería nada extraño, máxime si la chica del jarrón cambió de vida y s
e sumó al trabajo periodístico como colaboradora y con estilo propio. Claro que el problema dejó mal parado al propio Anello, a partir de las denuncias de su ex esposa, Verónica Caro, amiga precisamente de Samanta, a quien recomendó para sumarla al staff del periodista.
La historia de ambas muchachas compartiendo la escuela de sus hijos transitaba sin contratiempos. Farjat disfrutaba de su noviazgo con
Leandro Camani, en tanto Verónica y su marido hacían lo propio muy relajados. Todo, hasta que Farjat y Anello coincidieron en un viaje a Brasil que no quisieron asumir.
Al final, Verónica optó por hacer público el calvario que vino después. "Yo los presenté, hicimos citas todos juntos con nuestros hijos, pero todo cambió cuando me contaron que los vieron en Brasil juntos y lo negaron", reveló Caro a Intrusos. "Ahí empezó otra locura", agregó. Quien convivió durante cinco años con el periodista, contó que su pareja le suplicó no hacer trascender el tema porque lo perjudicaría en su trabajo. El conflicto, lejos de extinguirse, se agudizó. "El me levantó la mano tres veces, una delante de mis hijas, yo no quería denunciarlo y me costó mucho hacerlo", manifestó la mujer.
El tema se fue agravando hasta que la última semana tuvo un desenlace insólito. "El miércoles Samanta y Gabriel vinieron a mi domicilio. Se metieron en mi departamento y mis hijas se pusieron nerviosas, ellas la llamaban tía y yo sólo pensaba en que los dos se fueran cuanto antes. Ahí Samanta, enojada, me dijo que Leandro estaba al tanto de la relación y que
tuvo un cruce con Gabriel", asumió.
Por su parte, Anello, en el citado móvil de AM, denunció que su ex pareja entró en su departamento y le sacó ahorros de una caja de seguridad cuyo código conocía, al tiempo que mostró su automóvil todo rayado. Como vemos, esta historia continuará.i