Según publicó la agencia DPA, la gran cantidad de gas acumulado se incendió por la electricidad estática de una máquina masajeadora, utilizada para aumentar la producción de leche, y provocó una llamarada que quemó el techo del establo en la localidad de Rasdorf, Alemania.
El incidente la noche del lunes fue controlado por un equipo de bomberos que se desplazó al lugar junto con especialistas en medición de gases, señaló la policía.
El incendio dejó como saldo, además, heridas leves en una de las vacas. Los eructos y las flatulencias de las vacas liberan grandes cantidades de metano.