La mujer que fuera hallada sin vida en su departamento del barrio porteño Caballito, en medio de un gran desorden y en estado de vulnerabilidad, tuvo una “muerte natural” según determinó la autopsia, aunque el juez de la causa dispuso que, por el momento, el marido y su hijo (un reconocido youtuber) continúen detenidos, ya que sospecha que se pudo haber cometido el delito de “abandono de persona seguido de muerte”.
Los expertos del Cuerpo Médico Forense determinaron en la autopsia que Susana Fernández (de 61 años) murió de causas naturales por un “edema agudo de pulmón”, descartaron un homicidio e indicaron que la víctima no tenía ningún tipo de lesión provocada por un tercero.
Sin embargo, por el caso, el juez Pablo Ormaechea, quien subroga el Juzgado en lo Criminal y Correccional 11, dejó por el momento detenidos al marido e hijo de la víctima, Ignacio Vaccari (63), quien es empleado de la AFIP, y Ezequiel Vaccari (26), conocido en redes sociales como el youtuber “El PlayVakero”.
El juez Ormaechea y el fiscal Mariano de Guzmán creen que padre e hijo podrían haber incurrido en un “abandono de persona seguido de muerte”, un delito que el artículo 106 del Código Penal castiga con pena de entre 5 y 15 años de prisión.
Es que de acuerdo a la historia clínica reunida en el juzgado y la declaración de los médicos de la obra social que atendían a Fernández, la mujer atravesaba un complejo cuadro clínico que incluía obesidad mórbida (pesaba alrededor de 160 kilos), diabetes, hipertensión y depresión aguda.
“Estamos tratando de establecer si hubo una responsabilidad del marido y el hijo de no suministrar la medicación adecuada y cuidar como era debido a esta mujer que no podía valerse por sí misma. Queremos determinar si la colocaron en una situación de desamparo que la llevó a la muerte”, indicaron los investigadores del caso.
Según trascendió, ya declararon varios testigos, vecinos del edificio de la avenida Directorio 150, entre ellos, uno que reside en el 6º piso, identificado como Federico Teijeiro, quien ratificó todo lo que el pasado martes 19 contó ante la prensa.
Teijeiro reveló que el consorcio tenía conflictos con la familia del 2º A por los “olores nauseabundos” que llegaban hasta el octavo piso y relató que el día del hallazgo del cuerpo, al actuar como testigo del procedimiento, vio en el departamento de la víctima “heces humanas, cajas con comida podrida, ollas con líquidos, arañas, cucarachas, moscas y una dejadez de hace años”.
Además, fue a declarar al juzgado el plomero que seis días antes del hallazgo del cadáver fue al departamento a hacer unos trabajos y vio a Fernández “arrastrándose por el piso”, según contó a los responsables del consorcio, y pidió no volver al lugar porque a raíz de los olores estuvo dos días descompuesto.
El hecho fue descubierto el lunes 25, alrededor de las 13, cuando Vaccari padre llamó a una empresa de emergencias médicas para denunciar que había encontrado fallecida a su mujer. Los profesionales que arribaron al domicilio hallaron el cadáver desnudo y cubierto con una sábana y al constatar que llevaba muerta varios días emitieron un “código azul” y alertaron del hecho al SAME y a la Policía de la Ciudad.
Efectivos de la comisaría 10ª se presentaron en el lugar del hallazgo donde se entrevistaron con el esposo y el hijo de Fernández, mientras que el médico policial que revisó el cadáver constató que la muerte se había producido cuatro o cinco días antes.
El fiscal De Guzmán se hizo presente en el lugar y ante el cuadro de abandono y las sospechas en torno a las causas de la muerte, notificó de la situación al juez Ormaechea y así se dispuso la detención de los Vaccari padre e hijo.