Y se extendió: "En la primera mitad de la temporada, ustedes (por la prensa) pensaban que yo era muy bueno. Ahora piensan lo contrario. En los malos momentos todos te abandonan: la prensa, los hinchas y los futbolistas".
En un principio, en su llegada, Bielsa fue recibido como un ídolo. El equipo acompañó: tuvo resultados positivos y alcanzó la punta del campeonato. Ahora, en 2015, la cosa empezó mal. "Cuando ganaba nadie hablaba de mi futuro, ahora que llevamos cuatro partidos sin ganar sólo se habla de eso. Si hubiera firmado por dos temporadas, habría temido por mi despido. No quiero transmitir ninguna urgencia al club sobre mi renovación. No necesito a nadie para hablar del futuro", remarcó.
Marsella, ahora, está tercero en el campeonato, detrás de PSG y Olympique de Lyon: se ubica a cuatro unidades de la punta. En la próxima fecha visitará al Toulouse, que está en zona de descenso.