Fútbol
El árbitro del escándalo arribó a Buenos Aires luego de la final de la Copa Argentina en Córdoba y dejó en claro que todavía no sabe que fue parado y no impartirá justicia en Lanús – Sarmiento. "Simplemente soy un ser humano y me equivoqué", dijo
Diego Ceballos regresó a Buenos Aires luego de su bochornosa actuación en la final de la Copa Argentina entre Boca y Rosario Central y, tal como se esperaba, en el aeropuerto Jorge Newbery todos los flashes le apuntaron a él, quien llamativamente anunció al pasar que mañana dirigiría el encuentro entre Lanús y Sarmiento, por la última fecha del torneo, cuando en realidad fue parado por las autoridades.
"Simplemente soy un ser humano y me equivoqué. No fue penal", deslizó el árbitro de 37 años al ser consultado por el insólito penal que le cobró a Boca en el partido disputado en Córdoba.
Y, acto seguido, tiró: "Este fin de semana dirijo Lanús - Sarmiento". En realidad, será Mariano González el árbitro de ese partido.
Las cámaras de televisión registraron el insulto de una madre a Ceballos. "No tenés vergüenza. Ojalá no dirijas más", le espetó la señora, acompañada de su hijo.
Así se fue Ceballo anoche junto a sus asistentes Marcelo Aumente y Ernesto Uziga.
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