Balanta tuvo un arranque prometedor. Ramón Díaz lo puso en Primera. Su aparición fue una sorpresa, una bocanada de aire fresco para la defensa de River, que venía de varios golpes. Apenas se acomodó como segundo marcador central, tardó en salir: su nivel, altísimo, le permitió jugar el Mundial de Brasil para Colombia. Sin embargo, la Copa del Mundo, al final, lo enterró: mientras Balanta estaba de vacaciones, Gallardo, en la pretemporada, descubrió a Ramiro Funes Mori. El mendocino le arrebató la titularidad. Y se convirtió en ídolo.
En ese entonces, el colombiano se deprimió. Entró en un círculo vicioso de lesiones. Perdió confianza. Dejó de ser el moreno que en cada quite encaraba para adelante con el convencimiento de un toro. Ni siquiera la salida del Mellizo, en agosto del año pasado, le permitió recuperar el nivel del principio. Mejoró, pero no volvió a brillar.
En total, jugó 83 partidos en River y convirtió tres goles. Debuto contra Racing, en abril del 2013, con una victoria por 2-0 en Avellaneda. En Núñez, ganó cinco títulos: Copa Libertadores '15, Copa Sudamericana '14, Recopa '14, Torneo Final '14 y Suruga Bank '15.
De esta manera, sigue la reducción del plantel dirigido por Gallardo. Además de Balanta, ya se fueron Marcelo Barovero, Leonel Vangioni, Emmanuel Mammana, Luis González y Tabaré Viudez, quien en las próximas horas se sumaría a Nacional de Uruguay.