Comenzó el mundial. Argentina renueva sus expectativas y durante algunas semanas, el fútbol se desarrolla en Rusia. Sin embargo, en la Argentina todavía los clubes no saben cómo se jugarán los torneos, según la categoría a la que pertenezcan. No existe fixture que permita planificar viajes ni venta de abonos.
La Primera tendrá 25 fechas por el torneo regular, pero estudia un certamen para intercalar: la copa de la Liga o una liguilla para ingresar a la Sudamericana. El modo de juego variará según la novedad y los clubes esperan la pronta definición para tener al menos el inicio de la competencia con días y horarios, como el torneo pasado.
En la B Nacional el panorama no es distinto. Al igual que el resto de las categorías aún no hay un sistema de juego definido y está latente la reforma integral del Ascenso que mete en la antesala de la elite al Federal A para darle forma a la “Primera División” de AFA -la máxima categoría está en la órbita de la Superliga- que concentra equipos de todo el país y generará un nuevo negocio televisivo y una apertura al marketing inédita.
En las próximas semanas, la cúpula de la AFA estará en Rusia. Allí también estará el presidente de la Superliga, Mariano Elizondo, pero en Buenos Aires la jornada no queda planchada por más Mundial que se juegue: quedan las personas que pugnan tanto por la reforma del torneo de Ascenso, como aquellos que gestionen los recursos para que la Primera juegue además de su torneo, otro complementario con un estímulo económico y deportivo.
Desde Rusia, el presidente de la AFA, Claudio Tapia, tendrá las novedades que le transmita su secretario ejecutivo, Pablo Toviggino, quien además de ser el presidente del Consejo Federal, intentará lograr el consenso para darle forma a una nueva B Nacional. El ex miembro del comité normalizador no pisará suelo ruso: se queda al mando en Viamonte.
Si no sale este año será el próximo, pero el oficialismo trabaja para que en agosto se ejecute la reforma. Si este año se juega igual que el anterior, la B Nacional contará con un invitado de Qatar para generar nuevos recursos por la venta de derechos televisivos a Medio Oriente. En tanto, con Elizondo en Rusia, crecen las posibilidades para que Gazprom invierta en Superliga como sponsor.