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A los 30 minutos del segundo tiempo, el entrenador de PSG decidió sacar a Messi y la Pulga se dirigió al banco sorprendido y con algunos gestos de bronca.
La expresión de su rostro lo dice todo. Esa imagen en ademán de sorpresa describe a su perfección que al mejor futbolista del mundo no le gusta ser reemplazado. Por eso, cuando Mauricio Pochettino mandó a sustituir a Messi este domingo en el partido frente a Olympique de Lyon, la Pulga apenas lo saludó y le respondió con un gesto de asombro.
Sucedió a la media hora del complemento, con el marcador igualado 1-1 (luego ganó PSG con gol de Icardi). El entrenador determinó que el "30" deje la cancha e ingrese en su lugar Achraf Hakimi. Y en medio del trayecto hacia el banco, ante una pregunta del DT, Leo replicó con un tibio choque de manos y mostró cierta sorpresa por el cambio.
Tras llegar a los bancos de suplentes, Messi se sentó al lado de Paredes, mantuvo un pequeño diálogo con él y continuó demostrando bronca por la modificación.
Después del partido, Mauricio Pochettino explicó al respecto: "Le pregunté cómo estaba y me dijo que bien. Todo el mundo sabe que es un gran jugador, pero tenemos cinco cambios y estamos en el banco para tomar decisiones".
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