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De la mano de Sampaoli, un grupo de juveniles serán fundamentales en el trabajo de la mayor y constituirán el corazón de la Sub-20. El método de trabajo conecta al modo en que Pekerman nutría a Bielsa cuando era DT.
H ubo un tiempo en que los juveniles eran fundamentales para pensar la Selección mayor, algo así como mirar los partidos de reserva de clubes y pronosticar si la temporada siguiente la Primera estará, o no, bien abastecida por la cantera. Ese tiempo, se extinguió y los chicos que fueron sparrings de la mayor y crecieron entre Sub 17 y Sub 20 para escalar a la mayor, hoy son adultos con una carrera casi completa: Javier Mascherano o Sergio Agüero, son la última serie. El desequilibrio institucional de la AFA erosionó las bases que José Pekerman, Hugo Tocalli o Pancho Ferraro supieron construir. Marcelo Bielsa echó mano a ese trabajo que se hacía en las juveniles cuando los citaba maduros, llegaban con el concepto esperado, las nociones instaladas y una idea que no hay que explicar.
La seguidilla de entrenadores de la mayor -para esta eliminatoria la Argentina tuvo a tres: Gerardo Martino, Edgardo Bauza y ahora Sampaoli- atentó con el trabajo juvenil.
Técnicos despedidos, parches en las juveniles y papelones antológicos en las competiciones.
El último (mal) ejemplo fue el paso de Claudio Ubeda. No había continuidad entre las convocatorias y los sparrings para la mayor, apenas un recurso sin expectativas reales.
Ahora el método cambió y recupera lo bueno del pasado. Entre el 10 y el 22 de agosto el cuerpo técnico comenzará a trabajar con un grupo de futbolistas menores de 20 años con un primer objetivo: trabajar junto a la mayor de cara a los dos partidos fundamentales que se avecinan por eliminatorias. Si bien estarán dirigidos por Nicolás Diez, Sampaoli y Sebastián Beccacece estarán involucrados directamente en el proceso.
Estarán en el predio de Ezeiza entrenándose y concentrando con el cuerpo técnico con el mismo plan que funcionó en la gira en Australia y en Singapur.
Jugaban igual que como Sampaoli esperaba que lo haga Brasil y Singapur, en esa gira. Pero su trabajo no se agotará allí, luego serán el corazón de la Sub 20, jugando con la identidad que pretende el técnico para el seleccionado.
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La idea de los sparrings vueltos sub 20 es una fórmula que a Sampaoli le rindió en su etapa como entrenador de la a Universidad de Chile: jugadores como Charles Aránguiz o Eduardo Vargas que fueron sparrings de Bielsa en la selección chilena y luego fueron campeones de la mayor en la Copa América 2015.
En principio, serán convocados los mismos chicos que viajaron a la última gira, a quienes se le sumarán nuevas citaciones. Estarán Nehuen Pérez, Fausto Vera (Argentinos Juniors); Julián Carranza (Banfield); Facundo Fernández, Marcelo Weigandt (Boca), Tomás Cuello (Atlético Tucumán); Lautaro Morales (Lanús); Nicolás Castro (Newell’s); Jeremías Rodríguez, Benjamín Rollheiser, Juan Pablo Tomicich (River Plate); Federico Gattoni (San Lorenzo); Nazareno Bazán y Francisco Ortega (Vélez Sarsfield).
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