El chico estaba en el arco, cuando un anillo se le atoró en un gancho de los que sujeta las redes del arco; él se resbaló y, al caer al suelo, se cortó la extremidad de la mano izquierda.
"Uno de mis amigos lo encontró tirado en el piso y me llevó el dedo hasta mi casa", contó el chico en declaraciones a Canal 9.
Entretanto, su madre, Graciela, dijo que en el Hospital Penna le hicieron las primeras curaciones y luego fue derivado al Privado del Sur donde los médicos descartaron definitivamente la posibilidad de reimplantarle el dedo.
La mujer mostró el dedo de su hijo en un frasquito, le pidió a las autoridades que "den la cara" y argumentó: "Esto es algo que no puede pasar en un lugar público, hoy le pasó a mi hijo pero mañana le puede volver a pasar a cualquier otro chico".
El caso recuerda al del ex arquero de la Selección Argentina Nery Pumpido, quien en un entrenamiento de River, en 1987, su anillo de matrimonio se le enganchó en esa misma parte del arco y le cortó el dedo. En su caso, una microcirugía le permitió recuperarlo.