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La menor, de 10 años y con vínculos familiares en Argentina, estaba internada en grave estado desde el lunes. Es la tercera víctima fatal del accidente que también causó la muerte de la nieta de Cris Morena.
Una nueva víctima fatal se sumó a la trágica colisión entre una barcaza y un velero ocurrida el lunes pasado en la Bahía de Biscayne, en Miami. Este domingo, el Miami Yacht Club y la Guardia Costera de Estados Unidos confirmaron el fallecimiento de Arielle Mazi Buchman, de 10 años, una de las niñas heridas en el siniestro, quien permanecía internada en estado crítico.
Arielle era la menor de los tres hijos de Todd Buchman y Rhonda Mitrani, esta última hija de argentinos. Tras el accidente, la nena había sido trasladada al centro de trauma del Hospital de Niños Holtz, donde permaneció internada con pronóstico reservado hasta las últimas horas.
La niña era nieta de los argentinos Elias y Aída Mitrani, una familia con larga trayectoria en la comunidad judía de Miami. También era sobrina de Gabriel Groisman, abogado y político, quien fue alcalde de Bal Harbour, uno de los distritos más exclusivos del condado de Miami-Dade, entre 2016 y 2022.
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Con su fallecimiento, ya son tres las niñas que perdieron la vida por el trágico accidente. Una de las primeras víctimas había sido Mila Yankelevich, de 7 años, nieta de la productora argentina Cris Morena y del fallecido director Gustavo Yankelevich, cuya muerte conmocionó tanto a la comunidad argentina como a la de Miami.
La otra menor fallecida fue Erin Ko, de 13 años, de nacionalidad chilena, cuyos padres -de origen coreano- se habían radicado recientemente en Chile.
El episodio ocurrió durante una actividad náutica de un campamento de verano organizado por el Miami Yacht Club. Según trascendió, el choque tuvo lugar en un canal de aguas bajas, cerca de la Isla Hibiscus, cuando una barcaza -presuntamente vinculada a tareas de construcción- impactó contra el velero en el que navegaban cinco menores, de entre 7 y 13 años, junto a una instructora.
El caso está siendo investigado con extremo hermetismo. La Guardia Costera de Estados Unidos indicó que se está realizando una “investigación exhaustiva” para esclarecer lo ocurrido y determinar responsabilidades. Tanto el conductor de la barcaza como el capitán del remolcador fueron sometidos a pruebas toxicológicas, cuyos resultados aún no fueron difundidos.
El accidente generó un fuerte impacto en la comunidad local. El Miami Yacht Club permanece cerrado mientras se desarrollan las pericias, y se han multiplicado los pedidos de mayor regulación en las actividades náuticas para menores en la zona.
En tanto, entre las niñas sobrevivientes, Calena Gruber, de 7 años, fue dada de alta tras recibir varios puntos de sutura.
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