Cocinar la pasta con el fuego apagado permite consumir menos energía, medida que puede ser útil para ahorrar en la actual situación de crisis energética que, puntualmente, vive Europa, pero que nosotros podemos adoptar teniendo en cuenta que las tarifas van a aumentar con la quita de subsidios.
El premio Nobel de Física 2021, el italiano Giorgio Parisi, explicó que una vez que el agua comenzó a hervir, se puede echar la pasta y esperar dos minutos, y después apagar el gas para que se siga cociendo de forma pasiva.
El científico de la Universidad de la Sapienza de Roma calculó que se ahorra "al menos ocho minutos de consumo de energía".
"Lo más importante es mantener la tapa puesta, se pierde mucho calor por evaporación. Después de hervir la pasta, pongo el gas al mínimo, para que hierva muy poco sin consumir. También puedes probar a desactivarlo, como se sugiere en este post, que no es mío sino de Alessandro Burisi Vici y que simplemente he vuelto a publicar. Evidentemente, así se consume menos gas y la pasta se cocina igual", comentó.
A la hora de ahorrar energía cuando cocinamos hay varios tips a tener en cuenta. En primer lugar es beneficioso la anticipación. Tener todos los alimentos picados, pelados y descongelados al encender las hornallas también puede ser útil para ahorrar gas, ya que no estará prendido más tiempo de lo necesario.
Otros consejos para reducir el gasto de este energía en la cocina:
• Controlar la temperatura. Es recomendable empezar a cocinar con el fuego alto e ir bajándolo poco a poco (si la elaboración lo permite).
• Aprovechar el calor residual. Una vez apagado el fuego, este sigue produciendo calor residual. Por ese motivo, se puede apagar unos minutos antes del tiempo de preparación, porque el alimento se seguirá cocinando.
• Tapar las ollas. De este modo, se mantiene mejor el calor y se requiere menos energía para completar el cocinado.
• Usar la olla a presión. Esta puede alcanzar presiones más altas que la atmosférica, es decir, que el punto de ebullición del agua se incrementa. Eso significa que cocinamos a más de 100 grados centígrados y, por tanto, el tiempo de cocción se acorta y el gasto de gas disminuye.
• Preparar comida para varios días. Al cocinar varios platos juntos, se encienden menos veces las hornallas o el horno y el ahorro energético es mayor.
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