La educación, clave para las personas mayores

Para ello se toma a la vejez como una etapa llena de recursos que se debe sumar a fin de darle un lugar de interés y participación social.

Desde el programa se brinda capacitación y formación y constituye un lugar de encuentro e intercambio de saberes.

Los cursos son gratuitos y no se requieren estudios previos, “solo las ganas de seguir aprendiendo o de estar al día con algunos temas”, destaca la psicóloga Elida Penecino, coordinadora del ProUAPAM y docente de la Facultad de Psicología de la UNR.

En declaraciones a este diario, Penecino manifiesta que “la educación pública logra el encuentro entre un alumnado muy heterogéneo de adultos mayores porque hay quienes no hicieron la secundaria y otros que -por ejemplo- se jubilaron como docentes universitarios”.

“Esta diversidad de opiniones e ideas enriquece muchísimo la posibilidad de generar nuevos pensamientos y nuevas maneras de encontrarse”, afirma.

En los cursos se destaca la generación de redes y amistades. Al respecto indica que “la soledad es una problemática, muchos hijos no viven cerca y los adultos mayores se encuentran solos, dependiendo de una llamada o un contacto a través de la computadora y se pierde el contacto humano”; por lo que “la educación pública vuelve a ser un eje” para socializar en esta etapa del ciclo de vida.

“Fuerte crecimiento”

“El programa empezó en 2011 tras la propuesta del rector Dario Maiorana al Consejo Superior y fue aprobado por mayoría absoluta. Resultó un éxito de entrada porque prácticamente se sumaron todas las facultades”, recuerda Penecino.

“En los fundamentos, uno de los objetivos es la transferencia de conocimientos a las generaciones de adultos mayores porque en nuestro sistema educativo no estaba incorporado, si bien se aceptaba que la educación es permanente”, remarca.

Asimismo comenta que las personas mayores suelen hablar que es “una materia pendiente, no pudieron hacer o no pudieron terminar una carrera porque debieron trabajar y (la educación) aparece como una necesidad de este grupo etario”.

El ProUAPAM tuvo “una aceptación generalizada en toda la universidad”, así como un “fuerte crecimiento”, remarca.

“El primer año hubo 500 inscriptos; en 2012 fueron casi 1500 y de ahí en más no paramos. Este año estamos arriba de los 5 mil inscriptos (anuales), el 80% son mujeres y el 20% varones”, indica, entre los cursos que se dictan en la sede ubicada en Corrientes 2001, Rosario; en el Centro Universitario de Acción Territorial (CUAT), Boulevard Rondeau 980, Rosario Zona Norte; y en localidades de Cañada de Gómez, Carcarañá, San Lorenzo, Totoras, Villa Gobernador Gálvez.

Respecto a los cursos de mayor convocatoria señala que “la gente demuestra mucho interés y ganas de aprender acerca de las emociones y la salud”, también los de “fotografía porque hoy todo el mundo saca fotos”. Mientras que “los de pintura y escultura siempre tuvieron mucha aceptación y la siguen teniendo”; entre otros.

Penecino destaca que, además de los cursos, “siempre estamos haciendo actividades, jornadas, conectando con cuestiones actuales y también en contacto con ellos a través de encuestas y el contacto diario”.

Quienes se inscribieron vía online:

• El 0,35% de las personas nació entre 1925 y 1929

• El 5,65% nació entre 1930-1939

• El 34% nació entre 1940 y 1949

• El 48% nació entre 1950-1959

• El 12% nació entre 1960-1968.

Respecto a la distancia del domicilio a la sede:

• El 7% reside a menos de 5 cuadras.

• El 50%, entre 5 y 20 cuadras

• El 23%, más de 20 cuadras

• El 20%, en 30 cuadras o más

Sobre el nivel de estudios:

• Primario inconcluso, 3 personas

• Primario completo, 31

• Secundario inconcluso, 50

• Secundario completo, 401

• Terciario inconcluso, 99

• Terciario, 589

• Universitario inconcluso, 248

• Universitario, 896

• Posgrado, 102

En tanto, acerca de la actividad actual:

• Jubilado/a o pensionado/a: el 76%

• Trabajador/a independiente: el 11%

• Trabajador/a en relación de dependencia: el 9%

• Desocupado/a: el 4%