Kevin Hoistacher, el joven argentino detenido en la frontera entre Finlandia y Rusia por posesión de marihuana, y que debió pasar varios meses en prisión a raíz de este hecho, regresó al país para visitar a sus padres y contó su experiencia.
El muchacho, de 23 años, explicó que se quedará en el país por 15 días para visitar a parientes y amigos, luego de la experiencia que le tocó vivir en la cárcel rusa donde, relató, morían entre 3 y 7 personas por semana debido a la tuberculósis.
"Me levantaban a las 5 de la mañana a los golpes, tenía que salir sin remera y revisaban las celdas. (...) Nos daban un pedazo de pan a las 10, estábamos todo el tiempo en la cabina", explicó Hoistacher.
Tras pasar dos meses en prisión, la justicia rusa le dictaminó "prisión domiciliaria", por lo que Kevin debió pasar el resto del tiempo encerrado en un hotel, donde era visitado por su madre y el cónsul argentino Jorge Zobenica a quien le estará "eternamente agradecido".