El desplome en el precio del petróleo, el impacto económico de la epidemia de coronavirus y el consecuente derrumbe en los mercados alteraron la rutina de la Casa Rosada donde Alberto Fernández siguió minuto a minuto el cimbronazo en la economía mundial al tiempo que esta semana serían convocadas las petroleras para tratar el alcance en el país de la baja récord del barril de crudo.
El crack en los mercados estuvo acompañado por las conmemoraciones por el Día de la Mujer y el avalado "paro" de mujeres que ejercen su tarea en la administración pública. De hecho, en pleno sacudón de los principales centros financieros del mundo en el Palacio de Hacienda, el ministro de Economía, Martín Guzmán, le daba la bienvenida a la Dirección de Economía, Igualdad y Género, a cargo de Mercedes Dalessandro. En tiempos de vacas flacas, el Ejecutivo le da mucho valor a lo simbólico.
Ayer el Riesgo País tocó un nivel máximo en 15 años superando los 2800 puntos: los datos no eran alentadores al igual que las perspectivas para el yacimiento de Vaca Muerta.
El jefe de Estado arribó a las 10 a Casa de Gobierno y tuvo distintas "reuniones de trabajo". Por la tarde, Fernández recibió a la titular del PAMI, Luana Volnovich. Hoy, a las 11, el Presidente encabezará un acto por la entrega gratuita de medicamentos en la localidad bonaerense de Quilmes donde estará acompañada por esta funcionaria y la intendenta Mayra Mendoza. Pasadas las 17.30 el jefe de Estado se retiró por explanada Rivadavia.
El dólar abrió la semana sin cambios por la intervención del Central
"La mayoría de los productores fueron beneficiados por estas medidas"
En este contexto, se supo que el Presidente encomendó al ministro de Producción, Matías Kulfas, a convocar a las principales petroleras que operan en el país para analizar la baja del crudo Brent: en Estados Unidos el fenómeno provocó una reducción del 20% en el precio de los combustibles en las expendedoras de fluido. La reunión podría llevarse a cabo antes del viernes.
Las movilizaciones por el Día de la Mujer ayer continuaron en diferentes puntos del microcentro. El domingo, sorpresivamente, el frente de la Casa Rosada amaneció vallado, lo que provocó una airada reacción oficial, que tildó a la maniobra como "inconsulta"; es que la liberación de la Plaza de Mayo asomó en diciembre como uno de los gestos de normalidad que implementó el oficialismo. Con todo, las vallas habrían sido colocadas por la Policía Federal para evitar incidentes.
También llegaron al interior de la Casa Rosada medidas de "contención" frente a la epidemia de coronavirus. Son afiches intitulados "Saber para prevenir" que se pegaron en las puertas de salas, baños y salones del palacio gubernamental, con cuidados preventivos para evitar el contagio y con los síntomas de esta enfermedad respiratoria originada en China.
Un ex funcionario, sabedor de las limitaciones prespuestarias actuales y también las de antaño, dijo ayer que "el miedo hace pelota el sistema de salud", por el aumento extraordinario de consultas, de necesidad de insumos y de uso de aparatología en los hospitales. En el gobierno parecen ir reaccionando paulatinamente a medida que se conoce más sobre este virus que ha despertado una verdadera paranoia mundial.