Señor director:
Primero fue el caso de un niño de 16 años que viajaba en un cuatriciclo, en Pinamar, acompañado por su primo de 10 años. El vehículo volcó y murió el más pequeño. Tres semanas después, en Villa Gesell, se accidentó en circunstancias similares una niña de once años, que fue internada en grave estado. Luego de estos accidentes se conoció una propuesta para cambiar la ley de tránsito y regular el funcionamiento de estos cuatriciclos. Al margen de las medidas, que considero oportunas, creo que resulta necesario que hagamos un examen de conciencia. En este caso, mucho más importante que las leyes, son las directivas que manejen los padres con respecto a las conductas de los hijos. Ocurre algo similar, con esto, a lo que sucede con jóvenes que salen a muy altas horas de la noche. En las últimas semanas, hubo dos casos distintos. En uno, fue asesinado un joven, y en el otro, recibió gravísimas heridas otro muchacho de quince años. Si ustedes se toman el trabajo de buscar en Internet alguna noticia sobre el particular, les recomiendo que pongan en Google: "Mataron a joven a la salida de un boliche". Se van a encontrar con infinidad de casos. Es para reflexionar sobre el tema.
Alicia Mosquera
Barrio de Saavedra