Efectivos de la Policía Federal Argentina (PFA) y de la Prefectura Naval continuaron ayer con los rastrillajes en el río Chubut, en busca de posibles rastros de Santiago Maldonado, mientras que el Gobierno ratificó su apoyo a la Gendarmería, pero ahora puso en la mira el accionar de siete efectivos de esa fuerza.
A más de 40 días sin noticias del artesano, unos 300 uniformados trabajaron en la zona, luego de que los rastrillajes comenzaran el viernes pasado por orden del juez federal de Esquel, Guido Otranto.
Las tareas continuarán en los próximos días, ya que el rango de búsqueda es de 800 kilómetros aguas abajo del lugar donde se llevó a cabo el operativo de Gendarmería el pasado 1 de agosto, a la vera del Río Chubut, donde se lo vio por última vez a Maldonado, según señalaron testigos mapuches.
El Gobierno, en tanto, ya entregó al juez Otranto un informe que hace foco en la actuación de siete gendarmes que estuvieron cerca del río durante el operativo de desalojo del pasado 1 de agosto y tenía previsto aportar nuevos datos en las próximas horas.
La ministra Patricia Bullrich aclaró que no se descarta ninguna hipótesis, lo que incluye a la actuación de los gendarmes que participaron de un operativo en la ruta 40 para desactivar una protesta de miembros de la comunidad mapuche: “Estamos haciendo un trabajo sobre todos y cada uno de los gendarmes para que nos cuenten”, resaltó. De todas formas, reiteró que su objetivo es “cuidar a la institución”.
El juez Otranto, en tanto, afirmó este domingo que en los próximos días estarán los resultados de distintas pruebas de ADN que podrían aportar certezas a la causa.
Sostuvo que “es esencial tener el resultado del ADN para ver la situación de los gendarmes” y detalló que se analizará “todo lo que se encontró en los vehículos, la casa donde vivía Maldonado y la ropa que nos aportaron que sería de él”.
El magistrado se reunió este domingo con el secretario de Seguridad Interior, Gerardo Milman, quien viajó a Esquel para entregarle documentos con información para la investigación. Sobre la posibilidad de convocar a los gendarmes, el juez aclaró que “en esta causa aún no han declarado, ya que para definir en qué situación van a presentarse a declarar, se necesita tener el resultado de las pruebas de ADN”.
La posible conformación de un grupo de expertos independientes que colabore con la investigación judicial de la desaparición de Santiago Maldonado, avalado por el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (Acnudh), será evaluada hoy por el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y Amerigo Incalcaterra, representante de la oficina regional en Sudamérica de ese organismo de Naciones Unidas.
En un horario aún a determinar, Peña e Incalcaterra hablarán hoy en Buenos Aires sobre la viabilidad de esa iniciativa destinada a reforzar la eficacia y la credibilidad de la investigación a cargo de la Justicia Federal de Esquel (Chubut), uno de los pedidos que la familia Maldonado formuló a través de sus abogados el pasado 29 de agosto a representantes del Gobierno nacional, confirmaron a Télam fuentes gubernamentales.
El martes pasado, a través de un comunicado de prensa, Incalcaterra había expresado la preocupación de la Acnudh por la “falta de progreso en las investigaciones que se están llevando a cabo” y pidió a las autoridades “realizar la investigación apegándose a los estándares internacionales en materia de derechos humanos, en particular a la Convención para la protección de las personas contra las desapariciones forzadas”.
En el comunicado, la Acnudh reiteró su “disposición para colaborar y prestar la asesoría técnica” que los familiares de Maldonado y el gobierno argentino acordaron en la reunión que mantuvieron el 29 de agosto.
En tanto, el ministro de Justicia, Germán Garavano, aseguró que declaraciones de testigos en la causa por la desaparición de Santiago Maldonado “lucen como inverosímiles” o “eventualmente falsas”.
“Lo que da tristeza es que aparezcan testimonios de gente que estuvo en el lugar que lucen como inverosímiles o eventualmente falsos. También aparecen otras pistas faltas. Hay como un ánimo de algún sector de embarrar la cancha y complejizar la investigación”.