El empresario Cristóbal López se entregó en la madrugada de este miércoles a la justicia, luego de estar procesado en una causa que investiga una millonaria evasión en el pago al fisco de un impuesto a la transferencia de los combustibles, entre el 2013 y el 2015, y quedó detenido en Ezeiza.
Después de pasar varias horas prófugo, Cristóbal López, dueño del Grupo Indalo, finalmente se entregó la Justicia en el Edificio Centinela de Gendarmería, confirmó el secretario de Seguridad, Gerardo Milman, según la señal televisiva TN. En las próximas horas será trasladado al Penal de Ezeiza.
El juez a cargo de la pesquisa, Julián Ercolini, dictó además la prisión preventiva contra Fabián De Sousa -quien fue arrestado ayer- por entender que ambos violaron “deliberadamente las medidas cautelares impuestas” en el expediente.La causa investiga la evasión de 8.000 millones de pesos en el pago al fisco de un impuesto a la transferencia de los combustibles -a través de la empresa Oil Combustibles SA- que, según la acusación, se usó para capitalizar a otras empresas del grupo empresario que lideraba López.
El magistrado ordenó, además, un embargo de 17.000 millones de pesos sobre los López y su mano derecha. El pedido de detenciones se da en el marco de la causa que investiga una supuesta evasión de 8.000 millones de pesos del impuesto a los combustibles a través de su empresa OIL.
Recientemente la Cámara Federal de Casación Penal determinó que es competencia federal la causa: Ercolini había considerado que debía intervenir la justicia en lo penal económico y, en función de ello, dictó los procesamientos por el delito de administración fraudulenta por haberse cometido en perjuicio de una administración pública.
Al tiempo que procesó sin prisión preventiva al ex titular de la AFIP Ricardo Echegaray. De Sousa ya fue apresado en su vivienda del barrio porteño de Puerto Madero, mientras las autoridades aguardan la aparición del empresario ligado al kirchnerismo.
Echegaray fue procesado como "autor" del hecho, en tanto que a los empresarios los consideró partícipes necesarios y les trabó un embargo a cada uno de ellos de más de 17 mil millones de pesos.
Desde hace meses pesaba sobre López y De Sousa una inhibición general de bienes, confirmada por el juez, quien ahora fundó la prisión preventiva en que los empresarios intentaron violar esas medidas cautelares con el movimiento de las empresas.
"A partir de estos parámetros cabe tener en cuenta que en estas actuaciones existe un serio peligro de obstrucción de la investigación, a través del comportamiento hostil de los imputados frente a las medidas de carácter patrimonial ordenadas", señaló el juez en su fallo, al que accedió la agencia de noticias NA.
En ese sentido, aseguró que "se ha engañado sostenidamente" al Juzgado, a la Fiscalía actuante, a la AFIP en su doble condición de parte querellante y actora civil y a los veedores designados en este proceso, "ante la posible realización de actos fraudulentos deliberados orientados a la inducción a errores procesales para perjudicar a terceros; teniendo en cuenta también que los imputados, con la posible participación de otras personas, hubieran vendido como libres bienes cuya disposición habría sido inhibida por acto judicial".