Casi 4 de cada 10 personas mayores de 18 años presentan sobrepeso (37,1%) y 2 de cada 10 personas padecen obesidad de acuerdo a los resultados de la 3º edición de la Encuesta Nacional de Factores de Riego para Enfermedades Crónicas No Transmisibles en el marco de la Semana del Consumo Responsable de Azúcares organizada por FAGRAN.
Además, la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud (ENNyS) demostró en Argentina que el 10,4% de los niños y niñas de entre 6 meses y 6 años presenta obesidad, según las curvas de la OMS mientras que la prevalencia de sobrepeso en el país es de 31,5%, es decir, aproximadamente 3 de cada 10 niños y niñas tienen peso excesivo.
El sobrepeso y la obesidad son multicausales: componente genético, el desequilibrio energético, los hábitos poco saludables, un ambiente obesogénico y el sedentarismo.
Adicionalmente, el organismo internacional propone un consumo moderado de azúcares libres, reduciéndolos a menos de un 10% de la ingesta calórica total, es decir, 50 gramos en una dieta promedio de 2000 kcal equivalentes a 12 cucharaditas. La OMS además sugiere que una reducción a un 5% de la ingesta calórica (equivalentes a 25gr de azúca r= 6 cucharaditas aproximadamente) producirían beneficios adicionales para la salud.
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La Argentina se encuentra ubicada en el tercer puesto en cuanto a consumo de azúcar con una ingesta diaria de azúcar agregado que triplica la recomendada por la Organización Mundial de la Salud.
El consumo de azúcares libres podría disminuirse con recursos simples como conocer los distintos tipos de azúcares, que no todos son iguales. Además, es bueno elegir alimentos naturales en lugar de industrializados (procesados y/o ultraprocesados) y limitar el consumo de bebidas azucaradas (gaseosas y aguas saborizadas) e idealmente, reemplazarlas por otras bebidas, ya que constituyen una de las principales fuentes de consumo de azúcar agregado. La Argentina es el principal consumidor de bebidas gaseosas del mundo. Las gaseosas regulares contienen 21,9 gramos de azúcar en promedio cada 200 mililitros (equivalente a 4 cucharadas).
Entre las recomendaciones también está buscar alternativas para endulzar los alimentos o infusiones; reducir porciones de comida; limitar el consumo de golosinas; incorporar opciones saludables en el desayuno, merienda y postres; leer el etiquetado de los productos antes de elegirlos o consumirlos; evitar el 'picoteo' de alimentos poco nutritivos (golosinas, productos de panadería, snacks, gaseosas o bebidas azucaradas) entre comidas; y limitar la exposición de los niños a la publicidad de la industria de alimentos.