Ya comenzó la cuenta regresiva final hacia Rusia 2018; días, horas, minutos quedan ya para que comience a rodar la pelota y los nervios juegan un papel aparte. No solo en los hinchas, los jugadores también pueden sufrir el estrés por la tensión propia de lo que están jugando, por lo que es éste un aspecto en el que se tiene que hacer un especial hincapié para lograr los mejores resultados.
Más allá de que son jugadores profesionales y viven jugando partidos, nada se compara con la presión que enfrentan a la hora de representar a su país. El Mundial trae consigo una gran alegría para cada jugador al ser elegido miembro de la selección nacional, pero también una gran responsabilidad: ser parte de los 11 jugadores que estarán en la cancha para ser vistos por los presentes en el estadio, por los hinchas que los alientan desde su país y por los millones de televidentes que los ven en el mundo entero. Durante el período mundialista los jugadores sufren un nivel importante de estrés.
Ganar, perder, los rivales, la hinchada, la presión, los periodistas que critican y consultan... Todo lo que involucra la lucha por defender “la camiseta” puede traer serios trastornos si no se maneja de manera adecuada.
¿Cuáles son los síntomas del estrés que en general sienten los jugadores?
• Plano Físico: agotamiento, dolores musculares, cefaleas, hipertensión, trastornos respiratorios, calambres, etc
• Plano Emocional: miedo, inseguridad, indecisión, ansiedad, irritabilidad, fatiga, culpa, mal humor, etc.
• Plano Emocional Fisiológico: sudoración, tensión muscular, náuseas, escalofríos, entre otros síntomas.
• Plano Mental: propensión a errores, bloqueo mental, trastornos de memoria, bloqueo para resolver problemas, dificultad para concentrarse, etc.
• Plano Social: competitividad exagerada, bajo desarrollo personal, expectativas y exigencias exageradas, etc.
• Plano Valórico: incapacidad para decidir, dificultad para valorar un contexto de grupo, incapacidad de autocrítica, etc.
Para mejorar la situación en el plano físico, los jugadores deberían, entre otras cosas, practicar técnicas de relajación, evitar enojarse, realizar las cuatro comidas diarias dándole especial atención al desayuno, comer frutas y verduras.
En cuanto al plano emocional: intentar adaptarse al nuevo país y a la situación de Mundial, disfrutar y no padecer. Cultivar la paz interior y no hacerse mala sangre... Su trabajo es jugar pero perder un partido no es el fin del mundo y errar es humano.
Teniendo en cuenta el plano mental: siempre es bueno escuchar música que les agrade, eso relaja. También pensar en los valores que cultivan desde pequeños.
En cuanto al contexto o plano social: es indispensable que sean buenos compañeros, la solidaridad con el resto y el apoyo en el equipo facilita la disminución de presión. Es necesario planificar y actuar en grupo, siempre. Tener tolerancia. Lograr participar de las decisiones sin estar a la defensiva y sin darle valor al ego. Esto se vincula directamente con el plano valórico, en el que para disminuir el distrés (o estrés negativo) es necesario: una mente noble y sana, ser honesto y creer en un “nosotros”, en un “equipo”.