“El medicamento tomado de manera adecuada es un aliado; pero mal usado puede ser peligroso” para la salud, señala la directora del Departamento de Asuntos Profesionales del Colegio de Farmacéuticos de Entre Ríos (COFAER), Liliam Cecchini, y manifiesta la importancia de educar para su buen uso a fin de evitar “interacciones, efectos adversos”.
Con ese objetivo, junto a la coordinadora de Asuntos Profesionales del COFAER, Roxana Firenstein, llevan adelante el taller Buen Uso de Medicamentos para Adultos Mayores con la colaboración de distintas instituciones. En la charla que se brinda en centros de jubilados, universidades, entre otros establecimientos, se muestran los “errores comunes” que suelen cometerse por falta de información y brindan “consejos para efectivizar la acción terapéutica de los medicamentos aprendiendo a usarlos”, señala Firenstein.
Por su parte, Cecchini destaca: “Uno que está en el mostrador de la farmacia ve como muchas veces los adultos mayores no toman los medicamentos en la forma correcta, sobre todo porque tienen mucha medicación y son impacientes, no respetan las dosis, los tiempos o dejan de tomarlos sin orden médica”.
Remarca que “charlando con varios colegas llegamos a la conclusión que hacía falta educar respecto al buen uso de los medicamentos porque muchas veces se producen interacciones, efectos adversos, se abandonan los tratamientos y eso no es bueno para nadie, a cualquier edad”.
En tanto, Firenstein señala que el proyecto se realiza desde 2015, “cuando hicimos una prueba piloto en un centro de jubilados y resultó mejor de lo que habíamos pensado, fue una charla muy linda, interactiva y decidimos continuar”.
“Al poco tiempo, el Departamento de Adultos Mayores de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (UADER) se acercó e interesó -agrega-. Ellos hacen la logística, buscan el lugar, convocan a la gente” y ellas dictan el taller.
Otra de las instituciones con las que organizan los talleres es “la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER) y recientemente se firmó un convenio de colaboración con el PAMI para dar la charla a los afiliados” de la obra social, indica.
Por su parte, Cecchini destaca que en el taller “usamos un lenguaje coloquial, con ejemplos claros para que se entienda que el medicamento tomado de manera adecuada es un aliado; pero mal usado puede ser peligroso”.
En este sentido, Firenstein explica que “se brindan distintos tips para que el adulto mayor pueda efectivizar la acción terapéutica de los medicamentos aprendiendo a usarlos, ¿cómo tomarlos?, ¿con qué tomarlos?” y remarca que hay adultos mayores que toman dos o más “medicamentos juntos y eso no va”.
Asimismo señala que “les sugerimos que cuando van a los médicos lleven una lista con todos los medicamentos que toman, ya sean de venta libre o no, e incluso los suplementos dietarios, para que el profesional pueda hacer una prescripción más adecuada”.
Cecchini agrega que otra de las recomendaciones que se brindan es que “el medicamento hay que tomarlo con agua y si es un adulto mayor con bastante agua porque se necesita que el esófago lleve ese medicamentos a buen término”.
Al respecto aclara que “los movimientos que el esófago hace, en un adulto mayor están lentificados, y si se toma la medicación con poca agua se puede correr el riesgo que el medicamento quede detenido en medio del camino y provoque alguna lesión en el esófago”.
De igual forma indica: “Es peligroso tomar la medicación con jugo de pomelo. Obviamente si alguien quiere tomar jugo de pomelo lo puede hacer pero es preferible lejos de la toma de la medicación porque hay algunos principios activos que se accionan mal con ese jugo y poca gente lo sabe”.
En este punto, Firenstein remarca que “los medicamentos se toman pura y exclusivamente con mucha agua”.
Además destaca que “hay que tomarlos separados, con media hora, cuarenta minutos de diferencia porque es el tiempo que puede tardar el proceso digestivo en la absorción”.
Por su parte, Cecchini advierte que “no hay que tomar con tanta liviandad el tema de las hierbas medicinales porque son medicamentos que pueden interactuar con otros, como cualquier pastilla o cápsula; no son inocuas”.
También señala la importancia de “guardar los medicamentos en los envases originales porque ya están envasados de una buena manera para que no tomen humedad”, además es aconsejable “escribir en la caja la dosis que se tiene que tomar, la hora, y así se evitan las confusiones que pueden surgir al tener un pastillero lleno pero que, en algún momento, uno se puede equivocar” de pastilla.
“Es preferible guardar las pastillas en los envases, en la caja, en un lugar fresco, no en la heladera ni en el botiquín porque son lugares húmedos, tampoco en la guantera del auto porque hace demasiado calor”, explica.
Firenstein comenta que también realizan un taller sobre Buen Uso de Medicamentos para Cuidadores de personas mayores.
“En las charlas para adultos mayores notábamos la cantidad de cuidadoras que participaban, entonces junto a UADER se organizó un taller para cuidadoras donde les proponemos distintos tips”, señala.
Asimismo, destaca que desde 2012 llevan adelante el taller Buen Uso de Medicamentos en Escuelas Primarias junto al Colegio de Psicopedagogos de Entre Ríos. Este proyecto es específicamente para los alumnos de 5º grado, dado que ellos transmiten información a la familia, “se pueden cambiar hábitos culturales erróneos” en los adultos y, en un futuro, cuando ellos sean adultos, “tendrán más herramientas” sobre la importancia del uso adecuado de los medicamentos.
Las farmacéuticas Liliam Cecchini y Roxana Firenstein brindan una lista de consejos útiles en el taller Buen Uso de Medicamentos para Adultos Mayores. Algunos de los tips son:
En el taller Buen Uso de Medicamentos para Adultos Mayores que realiza el Colegio de Farmacéuticos de Entre Ríos (COFAER) se advierte sobre algunos de los “errores comunes”: