La Crapette es un juego de cartas de origen alemán, en el que pueden participar 2 jugadores y se juega con dos barajas francesas de 52 naipes, uno para cada jugador.
A diferencia de la mayoría de los juegos con carta, hay un desafío que se acerca casi a la provocación: sucede que cada jugador debe mezclar el mazo de su adversario y luego lo corta. Enseguida, cada uno de los competidores aparta 13 cartas boca abajo, que formarán su crapette; es decir debe colocar 4 cartas en forma vertical, adelante de él y a la derecha.
Dentro de esta organización, se debe dejar un espacio de dos cartas entre las cartas de los dos adversarios para las ocho pilas básicas.
Las 35 cartas restantes forman la baceta del jugador.El jugador, en su mano, da vuelta la primera carta de su baceta, y después lleva a cabo tantos movimientos como pueda. Cuando finaliza, mueve la carta de arriba de su baceta a la pila de descarte, y comienza el turno del adversario.
La ley del juego es la misma que para el solitario del tipo 'Paciencia':Las ocho pilas básicas del medio se utilizan para construir series del mismo palo, comenzando por el As y terminando con el Rey.
Construir en serieLas otras ocho cartas de la mesa se utilizan para construir series decrecientes, alternando el color. Solamente se puede mover las cartas de la mesa una por una, no toda la pila, una casilla vacía puede recibir cualquier carta.
La carta de arriba de la baceta, la del pozo de descartes y la de la crapette se pueden poner en la mesa conforme a las reglas especificadas. Una vez que se juega la carta de la baceta o de la crapette, se da vuelta la siguiente.
Atención y para tener en cuenta, si al comienzo o durante su turno (pero no al final) se vacía la baceta, se da vuelta el pozo de descartes, que formará la nueva baceta.
A la inversa y por otro lado, es bueno saber que también el jugador puede agregar una carta a la crapette o al pozo de descartes del adversario: para que esto suceda, sí o sí esta carta debe ser del mismo color y de índice inmediatamente inferior o superior que la carta de arriba de la pila.
Finalmente, no hay demasiados secretos para esta competencia intensa y sencilla: el primer jugador que haya puesto todas sus cartas en la mesa, gana la partida.