Se reparten siete cartas a cada jugador y se deja una boca arriba en la mesa, junto al mazo. En algunos casos, cuando los jugadores son más de cuatro (se acepta hasta seis), puede optarse por repartir menos de siete, por ejemplo, cinco cartas a cada uno. Cada participante debe tirar, si es que la tiene, una carta con igual índice o una del mismo palo que la que está en la mesa. Si no tiene, debe tomar una del mazo y ver si le sirve. Si no le sirve dice: Paso, y continúa el jugador de su derecha.
Cuando al jugador le queda una carta está obligado a decir: Me queda una. En el caso de que no lo haga, los demás le gritan ¡jodete! y le hacen levantar cinco cartas del mazo (en este caso hay variantes en el reglamento: algunos deciden que levante siete cartas y otros dos, en lugar de cinco). Si un jugador agarra o tira una carta cuando no es su turno se le da dos cartas como castigo.
Hace mucho tiempo, en el valle perdido de Sartenejas un grupo de estudiantes decidió tomar un mazo de barajas y abocarse a la idea de un nuevo juego. Luego de muchas horas de pensar y diagramar nació el Jodete, un juego común pero distinto, simple pero complicado. El juego es bastante sencillo, pero tiene algunas estrategias y particularidades, que pasamos a comentar: hay algunas cartas que hacen que el juego se complique para los adversarios y se haga más divertido.
Cuando alguno descarta una sota (10), el jugador siguiente debe levantar una carta del mazo y no puede descartarse. Si alguien tira un 11, cambia la dirección del juego. Por ejemplo: Jugadores A, B, C y D. Primero juega el A, luego el B y el C tira un caballo. Entonces, al que le toca jugar nuevamente es al B. Si este tira otro 11, el siguiente en jugar es el C, ya que vuelve a cambiar la dirección del juego. Si alguien descarta un 12, se saltea al siguiente jugador. Por ejemplo: Juega el jugador A, luego el B tira un rey. Entonces el siguiente a jugar es el D.
En el caso de que se tire un 2, el jugador siguiente levanta 2 cartas. Si se tira otro 2, el siguiente levanta 4 cartas. Y si se tira nuevamente otro 2, el siguiente levanta 6 cartas. Por último si se tira otro 2, el siguiente levanta 8 cartas. No hay descartes cuando levantan las cartas. Cuando se descarta un comodín, todos los demás jugadores deben levantar una carta y el que tiró el comodín se vuelve a descartar.
El comodín es muy peligroso: no tiene que quedar en la mano del jugador cuando otro corta, puesto que se pierde el partido.
Cada partida de Jodete se juega hasta 100 puntos (algunos eligen jugar a 200).
El que corta o termina la mano, obtiene -10 (menos diez). Los demás deben sumar los puntos de sus cartas de acuerdo al siguiente puntaje: el 1 y el 2 valen 20 puntos; las figuras valen 10 puntos; las demás cartas lo que tienen en sus índices. Por lo tanto, siempre conviene sacarse en encima los 1, 2, figuras y números más altos.