Mientras el US Open transita por sus primeras rondas y se empiezan a delinear los candidatos a quedarse con el último Grand Slam del 2022, la joven tenista Sara Bejlek, nacida hace 16 años en la república Checa, fue protagonista de un hecho que a muchos les causó estupor, pero para ella no fue algo para alarmarse.
Es que una vez que consiguió traspasar la qualy, todo un logro para una chica tan joven, fue a celebrar el triunfo con su padre y su entrenador que se encontraban en las tribunas y estos, emocionados también por el éxito de Sara, le dieron unas palmadas en la cola, lo que desató un escándalo mediático en medio del certamen.
“Si esto hubiera ocurrido en República Checa, nadie se ocuparía de ello, pero acá, en Estados Unidos... Fue un festejo normal, en medio de la euforia que significaba entrar al Abierto. Papá es mi papá y siempre lo será. Y conozco a mi entrenador desde los ocho años, es como de la familia", dijo Bejlek al ser consultada por la prensa.
"Claro que vi el video, se hizo viral. No me pareció nada grave, fue una reacción de todo el equipo en un momento especial, de felicidad para todos nosotros. Podrá parecer inconveniente e incómodo para algunos, yo no lo veo así, pero cuidaremos que no vuelva a suceder, quiero que se hable de mí por el tenis”, agregó al respecto.
Más allá de la incómoda situación en la que la involucraron y de que se fue derrotada en la primera ronda, Sara celebró su paso por Flushing Meadows. "Viví una gran experiencia y estoy muy feliz, esperando que lleguen los próximos torneos”, concluyó la tenista.