La Justicia de Catamarca, donde se tramita el concurso preventivo de Canale-Redepa SA, determinó que sean los trabajadores quienes “custodien” los bienes de la metalúrgica de Llavallol.
A través de un comunicado, la comisión gremial de la UOM (Unión Obrera Metalúrgica), informó que “El juzgado comercial de Catamarca donde tramita nuestro concurso preventivo determinó darnos la custodia de los bienes a los trabajadores”, recalcando que se trata de “una garantía” para mantenerla operativa.
La orden judicial fue celebrada por los 100 operarios despedidos, que desde el mes pasado están en la calle en defensa de su fuente de trabajo, ante el temor de que el establecimiento fuera “vaciado” por sus dueños.
El delegado de la planta, Nicolás Macchi, subrayó que “este fallo es la base para que no la vacíen y poder volver a poner en funcionamiento las maquinarias cuando aparezca algún inversor”.
Las expectativa también están centrada en la audiencia del martes próximo, cuando debería resolverse la conciliación obligatoria y ver el dictamen del Juzgado que decida cuándo pueden poner a trabajar las máquinas. La empresa aún no presentó el plan de crisis que solicitó la justicia.
Mientras continúan con el acampe, manteniendo las instalaciones, recibiendo donaciones (abrieron una cuenta bancaria) y con la venta de platos de comida para poder subsistir, ayer fueron recibidos en el Congreso de la Nación por un grupo de diputados del la bancada Frente para la Victoria - PJ, a quienes le presentaron el caso.