Todo el cuerpo operativo está integrado por mujeres, lo que constituye un hito que no registra antecedentes mundiales.
Por primera vez en la historia de los Cuerpos de Bomberos y sin antecedentes a nivel mundial, un destacamento operativo está conformado en su totalidad por personal femenino. Se trata del Destacamento La Boca, de la ciudad de Buenos Aires.
Este hecho no solo constituye un hito institucional, sino que representa el fruto de historias de vida atravesadas por la vocación de servicio, la superación personal y la voluntad de transformar el presente. Valores que fueron parte de la conversación que mantuvo el Jefe de Gobierno, Jorge Macri, con el equipo, el pasado 1° de mayo, cuando visitó el cuartel por el Día del Trabajador.
Denominado dentro del Cuerpo de Bomberos como "Rol de Dotación", es la base de una perfecta disciplina y de ordenamiento en las funciones. Cada integrante del equipo está sujeta a una tarea vital para realizar la prestación del servicio, de la manera más efectiva posible.
Una de esas integrantes es la Bombero Calificado Candela Peralta, quien trabaja en el turno segundo del innovador cuartel y cuenta sus primeras sensaciones como miembro del equipo: "Nosotras, a veces, pasamos más tiempo dentro del cuartel que en nuestras casas porque trabajamos 24 horas por 48 de descanso, pero en muchísimos casos ese día que vivimos juntas involucra tantas emociones dentro que pesa mucho más que esas 48 horas que descansamos".
Peralta, con tan solo 25 años, ocupa el rol de "pitonera" dentro del equipo. Es la encargada de ir a la cabeza de la línea de mangueras, es decir, la que maneja el pitón (pieza que conecta la manguera y expulsa el agua) y dirige el chorro para extinguir el fuego. Quien desempeña ese cargo también puede ser responsable de la búsqueda de víctimas y de realizar tareas operativas de mayor complejidad. "Cumplir este rol para mí es todo un desafío", confiesa.
Dentro de la cultura de Bomberos llegar a un puesto como en el que Peralta se desenvuelve es muy complicado y lleva muchos años, por eso es que ella valora y aprecia que la hayan seleccionado para ocupar ese cargo dentro del destacamento. "Busco predicar con el ejemplo, de estar todo el tiempo enseñando y tratando de que todas estemos al mismo nivel", narra.
Esta responsabilidad y claridad al momento de dirigirse hacia un operativo lo lleva en la sangre. Tanto su abuelo como su padre y sus tíos son bomberos. Toda su infancia estuvo rodeada del aire de heroísmo que esta profesión implica. Dentro de su familia es la primera mujer que decidió continuar con el legado. "En mi caso yo entré pura y exclusivamente por amor a esta profesión, la llevo literalmente en la sangre", explica con pasión Candela Peralta.