Un jurado popular declaró culpable al imputado por haber asesinado con un bate de béisbol y a botellazos a un joven durante los festejos por Año Nuevo en 2017, en un trágico hecho ocurrido en el partido de Pilar y que habría estado motivado por la nacionalidad de la víctima, ya que pertenecía a una familia boliviana.
Se trata de Nicolás Quiroga (de 19 años), quien fue hallado responsable del delito de “homicidio simple agravado por la participación de un menor de edad” del que fue víctima Martín Pablo Anze (22). Ayer, luego de una deliberación de casi tres horas, el ciudadano electo como presidente del jurado popular dio a conocer el veredicto a la jueza coordinadora, Marcela López, integrante del Tribunal Oral Criminal Nº 5 de San Isidro.
La familia de “Tincho” Anze estalló en llanto al conocer la decisión de los doce ciudadanos electos para el juicio, ya que debido a que la discusión se extendió, tenían algunas dudas sobre si iban a votar en favor de una condena.
“Por fin hay justicia para Martín. Estábamos muy preocupados porque pensábamos que estaba complicada la votación, no sabíamos si estaban divididos, si lo querían declarar inocente, no sabíamos si las pruebas eran suficientes”, dijo Dilma Cayo Anze, hermana de la víctima, luego de conocer que el imputado fue hallado responsable.
“Esta gente se conmovió con el sufrimiento” de su hermano y recordó que “muchos lloraron” en algunos momentos del debate, especialmente el miércoles, cuando se mostró la autopsia y la enorme cantidad de golpes que la víctima había recibido en la cabeza y el resto del cuerpo.
“Estoy agradecida a estas personas, que me daba cuenta que eran buenos. Se guiaron por el corazón pero también por la razón. Los asesinos de mi hermano son los culpables, lo mataron sin piedad y lo torturaron como a una bestia”, agregó la joven, quien reiteró que a Martín lo asesinaron por ser hijo de una familia boliviana y que él “era muy educado y no peleaba con nadie”
“El salió a festejar la llegada del Año Nuevo a la casa de un amigo y se cruzó con sus asesinos, que comenzaron a insultarlo y luego a pegarle hasta dejarlo casi muerto”, recordó. Y dijo que a su hermano “siempre lo calificaron de ‘bolita de mierda.’ y por eso lo fueron a buscar esa madrugada”.
Durante la etapa de alegatos, la fiscal María Inés Domínguez solicitó a los doce ciudadanos que conformaban el jurado que declarasen “culpable” a Quiroga, y dio por acreditado que el asesinato ocurrió en la esquina de Pedro de Mendoza y Garibaldi, de Pilar, a metros de la casa donde residía la víctima.
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